Las tensiones entre China y Estados Unidos van en aumento y se encuentran quizá en uno de sus peores momentos de la historia reciente, por lo que una guerra ya no parece una posibilidad tan lejana.
Los expertos citados por un medio del gigante asiático, el South China Morning Post, consideran que el enfrentamiento entre las dos naciones podría desencadenarse en el mar de la China Meridional con un accidente, más que con un ataque militar deliberado.
En dicho territorio náutico, pasa un tercio de toda la navegación mundial cada año con una operación comercial valorada en 3 billones de dólares; sin mencionar el valor de su abundante pesca y sus potenciales enormes reservas de hidrocarburos.
El mar de la China Meridional es actualmente “dominado” por la Armada estadounidense, gracias a sus bases en Japón, Filipinas y Guam; no obstante, China lucha por ser el ‘mandamás’ ocupando diversos islotes, así como construyendo islas artificiales, lo cual ‘le permite’ reclamar la soberanía del 90%.
En ese sitio, la Unión Americana lleva a cabo ejercicios navales con el fin de reivindicar la libertad de navegación en esas zonas, lo que llega a poner a ambas fuerzas en una “peligrosa cercanía”.
Por ejemplo, en octubre de 2018, un destructor chino y un buque de guerra estadounidense pasaron a solo 40 metros de distancia.
Hace tan solo 9 días, Mike Pompeo, secretario de Estado, afirmó que Estados Unidos “no permitirá a Pekín tratar el mar de la China Meridional como su imperio marítimo”.
Al respecto, Michael Auslin, investigador de la Universidad de Stanford en California, aseguró que es poco probable en la región; sin embargo “ambos lados están preocupados por una escalada que no puedan controlar”.
El director del Centro de Estrategias Marítimas de la Universidad de Pekín, Ho Bo, comentó que cualquier conflicto sería a pequeña escala, pero “el problema es que las consecuencias de estos conflictos militares no se pueden imaginar y es imposible controlar una guerra una vez que se desata”.
En la actualidad, las posibilidades subrayan que es más probable que Pekín y Washington opten por la guerra por “un accidente”.
