Torreón, Coahuila.- Este fin de semana, regresaron las actividades presenciales en los templos de la Diócesis de Torreón, luego de permanecer cerrados por más de tres meses debido a la contingencia del Covid-19.
Las misas dominicales se volvieron a efectuar con fieles, pero bajo estrictas medidas de prevención e higiene.
El presbítero Rafael López, coordinador de Comunicación Social de la Diócesis, informó que, en promedio, solo se admitió al 25 por ciento de la capacidad de personas.
Por ejemplo, en la Catedral caben 500 personas sentadas y hoy solo había 80.
“En mi iglesia caben 150 personas sentadas y solo dispuse de 80 lugares”, expresó.
Para contribuir con los católicos que no pudieron entrar, indicó que se continuaron con las trasmisiones en vivo vía Internet, mediante las redes sociales.
“Hoy nos vieron nueve mil 500 personas”, precisó.
Para volver a abrir sus puertas, indicó que les pidieron la frecuente desinfección y limpieza de las instalaciones, así como de las superficies de alto contacto como los reclinatorios, bancas, micrófonos y objetos de uso litúrgico.
Además, se establecieron filtros de revisión con termómetros para restringir el acceso a personas con temperatura superior a los 37.5 grados.
También se colocaron tapetes sanitizantes de calzado, y el uso del cubrebocas es obligatorio.
Asimismo, se dispuso de gel antibacterial y la comunión se reparte en la mano y no directamente en la boca. A la vez, se evita la interacción entre los feligreses en el saludo de paz.