Torreón, Coahuila.- El Doctor Alejandro Águila Tejeda, es el Director del Instituto Hispanoamericano de Suicidología, e imparte en Torreón desde hace un par de meses un Curso de Intervención en Crisis Suicida.
Era necesario preguntarle qué impresión tenía del suceso que marcó la vida de los laguneros el pasado 10 de enero, cuando un preadolescente atacó a varios de sus compañeros, mató a su maestra y luego él se quitó la vida.
Explicó que la situación que se dio es una condición de crisis por una serie de factores. “De inicio encontramos un mensaje en este homicidio suicidio, una necesidad de comunicar algo que se estaba callando, independientemente de la condición”.
Dijo que este tipo de hechos no son nuevos, pues han ocurrido en otros países y en el nuestro propio, algunos se conocen y otros no. “A nosotros nos llegan este tipo de caso para la postvención. ¿Qué pasa en este tipo de eventos?, surgen tras una serie de frustraciones y condiciones emocionales en donde las personas no han sido atendidas adecuadamente con una calidad de atención, de cariño y de cuidados y esto hace que se dé la frustración, se desborde y entonces el mensaje es un reclamo de amor, cariño de atención a la familia y a la sociedad”.
Señaló que desde el campo de la suicidología encuentran el efecto Werther, “Este es una repetición de los actos por el manejo ante la condición que se dio al evento. La mala información y la desinformación y que se haga apología de esta condición, hace que otros lo quieran imitar, para tener el mismo resultado”.
La sociedad debe estar alerta y emprender acciones para atender los problemas de condición mental. “Hay mucho que hacer, pero lo más importante es la base familiar”. Sin embargo hoy en día las familias tienen más relación virtual que real, se comunican más a través del WhatsApp, teléfono, chat, sin convivencia física.
“Sería importante regresar a los juegos de mesa, o días de campo, el compartir días juntos. Hay mucho individualismo donde no hay una construcción con el vínculo del amor, relación, conocimiento y comunicación, lo que desvirtúa lo real. Por eso insisto en que debemos retomar las actividades que teníamos en otras generaciones, donde la relación familiar era más adecuado”.
Segundo, “Retomar valores y principios de comunicación, amor, compañía, equipo; que los individuos se sientan integrados a su grupo escolar, laboral, social y no recluidos, recriminados o aislados, como el bullying que se le critica y juzga pero no se atiende”.
Es necesario la implementación a través del sector educativo y médico todas las actividades para que la gente se atienda a nivel terapéutico cuando padece un tipo de condición, llámese depresión, ansiedad o cualquier trastorno mental.
“Tememos el estigma que todos los trastornos mentales tienen que ver con el loco, que está mal, que no funciona, en vez de tratar de entender o comprender o identificar qué pasa, se da una condición de juicio. Está mal visto ir al psicólogo o al psiquiatra, en vez de ver que está atendiendo la salud. Muchas enfermedades de tipo mental son atendibles y tratables. Es como la salud física, no siempre la tenemos, pero si se atiende y se construye todos los días tiene solución”.
Exhortó a no bajar la guardia, “Porque de hacerlo pueden pasar problemas peores. Una vez que se tiene el antecedente se puede trabajar en la prevención, podemos hacer protocolos de acción y rehabilitación tendremos mejores pronósticos y una salud mental más adecuada”.
El doctor Alejandro Águila se encuentra haciendo investigaciones constantes para hacer un trabajo adecuado y científico de todo lo que deriva del suicidio.
Hoy en día las familias tienen más relación virtual que real
Alejandro Águila