El consejo del Patronato de la Unidad Deportiva de Torreón (UDT) es un organismo inoperante, de acuerdo con el informe que presentó ante integrantes del Cabildo su actual presidenta, Soledad Guerrero Garibay, al dar cuenta de una serie de anomalías que en su oportunidad se detectaron cuando se desahogó el correspondiente proceso de entrega-recepción de este importante espacio público.
De lo anterior se dio a conocer a través de un comunicado oficial en el que se establece que el citado informe se presentó el pasado 28 de abril durante una sesión de trabajo celebrada de manera conjunta por las Comisiones de Contraloría y del Deporte que presiden las regidoras Ana Luisa Cepeda Álvarez y Zazil Pacheco Pérez, respectivamente.
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Se menciona que son un total de 70 las anomalías que se encontraron dentro del proceso de entrega-recepción del patronato que junto con la UDT administra también el Gimnasio Municipal Torreón.
Por principio se hace notar que la entrega del patronato fue de manera incompleta debido a que faltaron datos y documentación que avalara los datos que se proporcionaron.
Luego se enlistan algunas de las irregularidades para hacer notar, entre otras cosas, que la estructura del consejo del patronato es inoperable y que ha habido falta de control interno en las taquillas, almacén y en el suministro de herramientas.
Además, se agrega, las cuentas bancarías y los estados de cuenta no fueron entregados, como tampoco las conciliaciones bancarias correspondientes y se detectó la falta de los estados financieros, así como su documentación comprobatoria.
Tampoco se entregaron el expediente fiscal, la constancia de opinión de cumplimiento, CIEC, la FIEL, el buzón fiscal, así como contenido del SAT; no fueron aclarados los montos de apoyo recibido por el Municipio y la aplicación efectiva y real, los cuales son alrededor de 11.5 millones entre 2020 y 2021; y no se contaban con flujos de efectivo y egresos diarios, semanales y mensuales.
Una vez que fue discutido el tema, los ediles coincidieron en que es un problema alarmante, en el que la Contraloría Municipal deberá intervenir, toda vez que le fueron reportadas tales irregularidades, y acordaron vigilarán de manera conjunta a fin de que se proceda en este caso conforme a la ley.
