Torreón, Coahuila.- Tras haber logrado establecer para ello acuerdos favorables con los representantes de las dos organizaciones que agrupan al personal sindicalizado del Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (Simas), el organismo se dispone a reanudar próximamente la aplicación de exámenes antidoping como una herramienta de prevención y a favor de la salud, con la intención de hacerlos extensivos a un total aproximado a los 585 trabajadores.
De lo anterior se dio cuenta a los integrantes del Consejo Directivo del Simas este jueves durante una reunión de carácter de extraordinario, a la que se les convocó precisamente con la intención de ofrecer información clara y actualizada acerca de este asunto, luego de que las pruebas toxicológicas que comenzaron a aplicarse el pasado martes 4 de febrero encontraron de inicio una total resistencia por parte de los sindicatos adheridos a la UNE y a la CTM que agrupan a personal administrativo y técnico del sistema, el primero de los cuales incluso llegó a realizar un momentáneo paro laboral a manera de protesta, esto el día viernes 7.
De acuerdo con lo informado al final de la reunión por el secretario del Ayuntamiento, Sergio Lara Galván, de manera conjunta con el presidente de la comisión del agua en el Cabildo, Esteban Soto Durán y el gerente general del Simas, Juan José Gómez Hernández, quedaron atrás las quejas sobre supuestas medidas de represión o acoso laboral que llegaron a esbozar los trabajadores que se oponían a la medida, y es que en reuniones de trabajo con sus representantes se llegó al entendimiento de que las pruebas toxicológicas no solamente están contempladas en el ámbito laboral dentro de la Ley Federal del Trabajo, sino que también son solicitadas como medida de prevención y a favor de la salud por parte del Instituto Mexicano del Seguro Social.
En ese sentido, se logró que los exámenes los aceptara ya en un acuerdo formal, en primera instancia la representación del sindicato adherido a la UNE, bajo ciertas condiciones que ya de antemano fueron avaladas también, aunque hasta ahora sólo en forma verbal por parte del gremio perteneciente a la CTM. Ambas organizaciones agrupan a poco más de 100 y 450 trabajadores, respectivamente.
Parte de las condiciones establecidas contemplan que en caso de que algún trabajador llegara a dar en su examen un resultado positivo en cuanto a consumo de alguna sustancia prohibida, tendrá la posibilidad de someterse a una segunda prueba que confirme o descarte el diagnóstico inicial. Asimismo, se aclaró que si al final se da la confirmación, el involucrado no será despedido de su trabajo, sino que se le dará la oportunidad de que se someta al necesario tratamiento o proceso de rehabilitación para luego poder reintegrarse a sus labores sin problemas.
Lara, Soto y Gómez, negaron de manera categórica que, como se divulgo a través de rumores, la aceptación de los dos sindicatos al proceso de exámenes antidoping se haya dado como resultado de algún tipo de presión y menos a la supuesta intención de disolver uno de estos gremios, el de la UNE.
Se hizo notar que esta medida, además de legal, es totalmente conveniente y necesaria, pues le apuesta a la prevención de riesgos tanto para el trabajador que en su desempeño emplea vehículos, maquinaria y herramienta, como para la ciudadanía.
Finalmente, se dijo que la decisión de realizar pruebas toxicológicas a todo el personal del Simas si se debió a indicios de probable consumo de estupefacientes, a partir de reportes hechos por la ciudadanía.
