Con una inversión de aproximadamente 18 mil dólares, el Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (Simas) se dispone a adquirir un moderno equipo de monitoreo que le permitirá mejorar los resultados en el trabajo que realiza de manera permanente para detectar y en su caso contrarrestar casos de robo o “huachicoleo” de agua, que pueden darse a través de tomas clandestinas, así como fugas.
Juan José Gómez Hernández, gerente general del organismo público, informó que antes de tomar una decisión definitiva al respecto, durante una o dos semanas se estarán realizando pruebas con uno de los equipos de monitoreo que distribuye una empresa especializada, a fin de constatar su utilidad y eficiencia.
Comentó que, si bien la búsqueda de fugas y de tomas clandestinas se realiza de manera constante, en realidad es poco común que se lleguen a identificar casos flagrantes de “huachicoleo” de agua.
De hecho, en lo que va del presente año solamente se han detectado dos conexiones irregulares a la red de distribución, ambas en la colonia residencial San Isidro, así que lo que se pretende con el nuevo equipo a adquirirse es precisamente mejorar los resultados al respecto.
Advirtió que el robo de agua potable lo sanciona en Simas inicialmente con el corte del servicio y una multa económica por el equivalente a 100 salarios mínimos, y en caso de reincidencia el castigo se puede elevar tres veces esa cantidad, y si después de eso la irregularidad persiste se aplica como medida drástica la cancelación de la descarga de drenaje en el domicilio del infractor.
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De acuerdo con Gómez Hernández, a partir de que se concrete la compra del sistema, habrán de intensificarse los operativos de búsqueda de tomas clandestina y fugas, con lo que desde luego se busca ganar eficiencia operativa y desde luego también mejorar los ingresos para el Simas.
