Torreón, Coahuila. - Como resultado de las gestiones en las que le ha tocado participar en la ciudad de México de manera conjunta con su homólogo duranguense José Rosas Aispuro, el gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís se mostró confiado en que finalmente Gómez Palacio y Lerdo habrán de enlazarse al proyecto del Metrobús Laguna, para lo cual aún queda todo un proceso que seguir para finalmente llegar a concretar la modernización del servicio de transporte público que en el caso de Torreón y Matamoros, se hará realidad al entrar el nuevo sistema en operaciones a partir de enero o febrero del próximo año.
Además, confirmó que ya se avanza en la elaboración de los proyectos con base en los cuales se le apostará a lograr otros sistemas de movilidad BRT en Saltillo y Monclova, en este caso con la idea de concretarlos antes de que concluya la actual administración estatal.
Por lo que respecta a Durango, considera que con las gestiones realizadas las cosas van ahora por buen camino en un asunto en el que, advierte, el proceso apenas se inicia y quedan aún muchas cosas por superar como sucedió en su momento en La Laguna de Coahuila, donde el avance es ahora tal que el proyecto se ha ejecutado en un 95 proyecto del proyecto.
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“Nos interesa que Durango también tenga su propia dinámica, que tenga los recursos y que además se hagan las consideraciones para un proyecto de zona conurbada, como estaba contemplado desde el inicio, entonces nosotros apoyamos a para que le restablezcan los recursos para que pueda iniciar rápidamente y que de alguna forma podamos empatar en algún momento los intereses del proyecto”, comentó el mandatario coahuilense
Por otra parte, Riquelme Solís no negó que haya diferencias e inquietudes que enfrentar en las reuniones que las autoridades estatales sostienen con los concesionarios del transporte público en Torreón llamados a integrarse al Metrobús Laguna, con negociaciones e las que la polémica a veces no se hace esperar.
Aun así, confía en que al final no habrá impedimento para que el BRT comience a operar a principios del próximo año en Torreón y Matamoros, pues “espero que así sea y que pronto se llegue a un acuerdo con todas las partes, ya que no estamos tratando de imponer nada sino de consensar el proyecto del Metrobús”.
Ese es el objetivo de las mesas de trabajo en las que con justa razón los concesionarios reclaman su tiempo, su espacio, su negocio y sobre todo las garantías de que el proyecto realmente ha de funcionar con su directa participación
