Torreón, Coahuila. - Después de que se emitió este lunes un decreto estatal mediante el cual se prohíbe y sanciona la realización de fiestas privadas con más de 15 asistentes, con lo cual se otorga a los municipios las herramientas legales necesarias para atacar de una manera más directa una de las principales fuentes de contagio de Covid-19, el gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís no descartó que en el transcurso de las próximas horas o días puedan adoptarse otro tipo de medidas orientadas a inhibir la movilidad social, si es que no se logra reducir al menos moderadamente la incidencia de transmisión del virus en La Laguna.
Por lo pronto, dijo que se ha considerado pertinente evitar la aplicación de la ley seca que en cambio sí se está vigente en el vecino estado de Durango, pero aseguró que si la situación lo llega a ameritar, se optaría primero por cerrar los expendios de bebidas alcohólicas para dejar abierto el consumo solo en restaurantes y otros establecimientos que pueden fácilmente ser regulados.
Luego de que los integrantes de la Mesa de Salud demandaron a las autoridades de Coahuila y Durango homologar los criterios y acciones encaminados a inhibir los riesgos sanitarios relacionados con el Covid-19, Riquelme Solís trató el asunto al presidir una más de las reuniones de trabajo del Subcomité Técnico Regional Covid-19 Laguna, donde enumeró la serie de medidas enérgicas que se han tomado en esta región y en general en la entidad desde hace ocho meses, y más aún en los últimos días semanas, para tratar de contener los contagios y al mismo tiempo para incrementar la capacidad de atención hospitalaria.
Se refirió a que se ha actuado con pertinencia ante el hecho de que Coahuila se encuentra ahora en semáforo naranja, mientras que Durango está en rojo, y sostuvo que pese a ello no hay rivalidad alguna entre las acciones y medidas que se han tomado en esa entidad y las que por otra parte se aplican en esta.
De acuerdo con Riquelme Solís, lo que se hace en La Laguna de Coahuila, sí respalda y complementa lo que por su parte se realiza en la vecina entidad, y se refirió en ese sentido a la manera en que se han endurecido las acciones de inspección que han sancionado irregularidades puntuales en establecimientos comerciales y de servicios, suspendido numerosos eventos sociales en domicilios particulares y en comunidades ejidales, y clausurado una buena cantidad de quintas y otros espacios.
En ese sentido reiteró que está en constante comunicación con el gobernador de Durango, José Rosas Aispuro y “las acciones que determinó, las estoy apoyando con que no se nos venga gente acá a realizar compras o consumo masivo de vino, sin embargo, somos una zona conurbada en la que unos trabajan aquí y viven allá y tenemos que cuidar el caso de el paso diario, sobre todo porque las empresas continúan abiertas y no resulta lógico su cierre en lo que se refiere al transporte”.
De cualquier manera, dejó en claro que cualquier decisión que pueda tomarse en las horas y días siguientes dependerá de la manera en que evolucione a nivel regional la pandemia, y especialmente de que disminuya o no la ocupación hospitalaria en áreas Covid.
A este respecto, indicó que actualmente a nivel estatal se reporta, en relación a que se cuenta con un total de mil 059 camas Covid, una ocupación hospitalaria del 65.2 por ciento, mientras que en la región Laguna, con 407 camas, el índice es ahora del 83 por ciento, luego de que hubo una reducción por el hecho de que se logró ampliar la capacidad de atención con la habilitación de nuevos espacios para ello.
