Reginaldo Carrillo Valdez, presidente municipal de San Pedro del Gallo, Durango, afirma que las lluvias por fortuna en tres días han llegado las lluvias, lo que será un paliativo para la agricultura y ganadería, luego que se habían contabilizado hasta el mes de septiembre, la muerte de cuando menos 150 reses.
El agua nunca es rechazada y en estos días hemos regado algunos cultivos, principalmente avena en seco, porque el maíz y el frijol no se dio por la tardanza de las precipitaciones pluviales y fueron mínimas las hectáreas que se lograron.
Eso sí, recordó que requieren del apoyo del gobierno federal y estatal, porque la lluvia será moderada y por lo tanto se requiere para insumos para sembrar y cosechar, ya que de estos dos rubros depende la economía de los habitantes de este municipio.
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Dijo que los agostaderos están secos junto con pastizales y que decir de los abrevaderos que siguen inmóviles sin dar algún beneficio y esto pone en riesgo a cientos de cabezas de ganado, cuya carne se exporte a los Estados Unidos, aunque también se atiende el mercado nacional, observó.
En lo que se refiere a la avena, se sembraron 100 hectáreas, pero solo se trabaja en 40 hectáreas, de lo contrario cuando llegue el frío habrá mayores problemas.
En San Pedro hay cuando menos 2500 habitantes, quienes se mantienen a través de la agricultura, con primaria, secundaria.
