Gómez Palacio, Durango.- La Comisión para la Protección Contra Riesgos en el Estado de Durango (Coprised), decomisó en la semana pasada 256 kilos de pescado diverso y 1 kilo 700 gramos de ostión, los cuales a pesar de estar en refrigeradores no habían sido sujetos a revisión por este organismo.
El doctor Jesús Rentería Maldonado, dijo que en este sentido no se aplicaron multas, sino que se hicieron algunas recomendaciones, porque para expenderlos al público primero debieron haber pasado a revisión, pasándose este requisito por alto.
Comentó, además, que fue en seis negocios donde se decomisó la diversidad de pescados que se acostumbra consumir en Semana Santa, mientras que en un comercio se detectó un kilo 700 gramos de ostión que no presentaba las características para su consumo, de ahí que también se hayan quitado de la venta al público.
Te recomendamos:
“Seguiremos regulando los puestos de comida, tanto establecidos como callejeros para evitar alguna intoxicación y más cuando se acerca la temporada de calor en que se descomponen con mayor rapidez”.
Lo decomisado se mandó al laboratorio de la Coprised, aunque en algunos casos, el producto estaba en refrigeradores, sin embargo, “nuestros inspectores no fueron avisados para que tanto el pescado como el ostión fueran revisados, ya que ello es una obligación de los comerciantes”.
“Seguiremos inspeccionado bodegas y frigoríficos, haciendo recomendaciones al mismo tiempo, sobre el cuidado y venta de alimentos de toda índole, pidiendo a la vez que se tengan en exhibición para que el público también pueda darse cuenta de lo que va a comprar”.
Dijo por último que se aplicaron 80 muestras de pescado y se exigió que estuviera siempre refrigerado, al igual que otras carnes de ganado bovino y de pollo.
Muy pocos kilos presentaron descomposición, mientras que otros comercios no cumplieron con los estándares de refrigeración
Coprised