La muerte de las abuelas pegó de lleno al trabajo de madres de familia, quienes tuvieron que volver a casa para cuidar de sus hijos.
Un estudio elaborado por la Universidad Northwestern permitió conocer lo anterior, precisando que un 27 % de mamás tuvo que renunciar ante el fallecimiento de sus propias madres, quienes estaban al cuidado de sus nietos.
Miguel Talamas, autor principal del estudio, detalló que se llegó a la conclusión anterior después de que se levantaran datos entre 2005 y 2020.
Asimismo, explicó que la ausencia de las abuelas pegó de esta manera en las casas con menores ingresos, puesto que en los hogares donde la entrada de dinero es mayor pueden optar por guarderías o hasta niñeras privadas.
Y es que se descubrió que cerca de la mitad de las abuelas, 40 % para ser precisos, cuidan a sus nietos de 6 años o menos.
Ante ello, Talamas comentó que una posible solución sería incrementar las opciones de cuidados infantiles por parte de los gobiernos, con lo que mejoraría el acceso de las mujeres a su derecho a la equidad y conseguir así un empleo.
