En la actualidad los problemas de aprendizaje son debido a los deficiencia visual en los bebés y niños, pues el 70 por ciento del conocimiento adquirido en la primera etapa del crecimiento es a través de los ojos, si la visión no es óptima, todos los demás procesos se van a ver lentos, pero, ¿cómo saber si un bebé ve o no ve?
El presidente del Consejo de Optometristas de la Laguna, Christian Alfonso García Moreno, explicó que al primer mes del nacimiento se deben revisar los ojos de los bebés a través de un tamizaje visual, “estamos acostumbrados al tamizaje metabólico que es cuando le sacan sangre del pie, pero muy poca gente realiza el visual”, manifestó.
Detalló que el tamizaje visual ayuda a saber si el pequeño tiene una enfermedad congénita ocularmente, como retinopatía del prematuro, glaucoma congénito, cataratas congénitas o cáncer en el ojo, conocida como retinoblastoma, además de evaluar el proceso de maduración de la alineación de sus ojos, o sea que no se desvíen.
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Christian Alfonso García Moreno
Posterior a esto, hasta el sexto mes de nacimiento del bebé se debe realizar un estudio para determinar su agudeza visual, es decir si éste ve, “con una paletas con líneas blanco y negro se evalúa que el bebé volteé a verlas, pues cabe señalar que él bebe no nace viendo a colores”, manifestó García Moreno.
Si todo transcurre bien, se debe realizar una visita al primer año con un especialista de la optometría pediátrica para evaluar temas funcionales, es decir que tengan visión a colores, tridimensional, enfoque y distintas características que le ayuden a tener completo un tema de visión, o sea cómo está viendo el pequeño.
Para detectar problemas visuales en los pequeños se debe evaluar que el bebé pueda seguir objetos, posteriormente revisar en los niños que acuden al kínder si tuerce la cabeza, si entrecierra los ojos o si se queja de dolores de cabeza o si tiene una mala escritura, incluso si se brinca reglones o no termina de escribir bien las letras.