Torreón, Coahuila.- Datos de la Secretaría de Salud de Coahuila revelan que 335 mil personas de la región Laguna de Coahuila no tienen algún servicio médico. Se incluye a habitantes de Torreón, Matamoros, Viesca, San Pedro de las Colonias y Francisco I. Madero.
Carecen de afiliación al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) o del Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI).
Para Marco Zamarripa, director del Consejo Cívico de las Instituciones (CCI) Laguna, la situación es “preocupantes” y más por la actual crisis sanitaria que padece México y el mundo.
“El costo de este padecimiento es muy elevado, desde las pruebas, los honorarios médicos, y no se diga si se requiere hospitalización. Las familias tienen que endeudarse, empeñar bienes. Muchas de ellas atraviesan por desempleo o salarios bajos que nos hay forma de enfrentar esta situación, que agrava la estabilidad familiar”, comentó.
“Porque hay que cubrir necesidades básicas de alimentación, servicios, etcétera. Es un escenario muy desalentador, porque puede llevar a conflictos de pareja, violencia familiar al tener alto nivel de endeudamiento. Recomendamos busquen asesoría legal para minimizar los riesgos de perder el patrimonio frente a esta crisis”, indicó.
Por su parte, Iván de Luna Aldape, director de Investigación Estratégica del Instituto Municipal de Planeación y Competitividad (Implan) de Torreón, opinó que dentro de los factores que determinan el nivel de bienestar social de las personas y la población, el derecho a la seguridad social, entendida en su dimensión de acceso a servicios de salud, es de importante relevancia dadas las condiciones sobre las que se maneja el país.
“Hasta hace poco esta cobertura era limitada por el derecho a un servicio de salud ligado al trabajo, a través del pago de las cuotas del IMSS o ISSSTE. Al ampliar la oferta de posibilidades de acceso con instituciones como Bienestar o Seguro Popular, o privadas, se logra cubrir a una mayor proporción de la población que, en un país donde la informalidad laborar es considerablemente alta, no contaba con una manera directa de acceder a estos servicios, obligándolos a recurrir a servicios privados que generalmente implican un mayor costo”, manifestó.
“El siguiente paso es lograr la accesibilidad universal, pero existen muchos escalones por cumplir como la mejora en los servicios de salud y su disponibilidad o cobertura, tanto en calidad como en ubicación. Todo esto solo se logra al reformar la manera en la que operan las instituciones actualmente, optimizando los recursos y mejorando gestión financiera”, puntualizó.
Numeralia:
- 335 mil personas no están afiliados al IMSS, ISSSTE o INSABI.
