Empresas aseguradoras advirtieron a sus clientes que las complicaciones de salud, provocadas por el consumo de “remedios” como el dióxido de cloro ante el Covid-19 u otras enfermedades, no serán consideradas entre los gastos médicos mayores.
Un comunicado de Seguros Monterrey New York Like dio a conocer que, al no ser considerado como un medicamento con permiso vigente expedido por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), este no será cubierto como parte de la póliza.
En el mismo documento indicó que en América Latina la supuesta eficacia del dióxido de cloro ha tomado relevancia en “el tratamiento y prevención del Covid-19”, esto pese a que la Organización Mundial, así como la Panamericana de la Salud (OMS y OPS).
Al mismo tiempo, GNP seguros lanzó otro documento en el que precisó:
“Todos los casos en los que se haya utilizado cualquier sustancia o tratamiento experimental se revisarán de manera puntual. Sin embargo, es importante enfatizar que dado que el dióxido de cloro puede resultar altamente tóxico si no se aplica de manera adecuada con indicación y supervisión de un médico especialista, no se cubrirán los efectos o complicación derivados del consumo de dicha sustancia”.
Otra aseguradora que se sumó a hablar sobre los riesgos del dióxido de cloro es AXA. Esta indicó:
“En caso de ser hospitalizados por Covid-19 y en sus estudios resultan positivos por presencia de dióxido de cloro en sangre o si llegasen a tener una complicación relacionada por haberlo usado como ‘prevención’ para Covid, su aseguradora no se hará responsable de las complicaciones ocasionadas por el consumo, ya que el consumirlo es considerado como auto envenenamiento o agravación del riesgo, ya que no se encuentra avalado por la FDA y Cofepris, organismos encargados de evaluar y aprobar productos para uso médico”.
El dióxido de cloro es un producto tóxico para el consumo humano y eso está comprobado por la ciencia de acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la cual señaló es efectivo para controlar virus, bacterias, protozoarios y patógenos en superficies.
