Un insólito caso de cese laboral se registró en Fayetteville, Georgia (EE. UU.). Un hombre denunció que el último sueldo de su antiguo empleador le llegó en forma de más de 90.000 monedas de un centavo cubiertas de aceite que fueron arrojadas en la entrada de su casa.
Se trata de Andreas Flaten, quien dejó su trabajo en A OK Walker Autoworks, un taller mecánico, en noviembre de 2020, pero enfrentó varios problemas para recibir su liquidación, por lo que tuvo que comunicarse con el Departamento de Trabajo de Georgia, según Fox 5 Atlanta.
Olivia Oxley, pareja de Flaten, contó que él dejó el trabajo porque el “ambiente laboral era tóxico”, lo que provocó la ira de Miles Walker, el exjefe. En un principio, el pago se pactó para enero pasado, pero se incumplió el acuerdo. Luego de tomar acciones legales, Flaten finalmente recibió los 915 dólares que le debían, pero de una manera inesperada.
El hombre asegura que, cuando salía de su casa para ir a la tienda, se topó con un montón de centavos grasientos que habían dejado en la puerta de su casa. Sobre la pila de monedas, cuyo peso ronda los 230 kilos, fue dejada una nota que decía “Fuck you” (jó... en español).
Actualmente, la liquidación de Flaten reposa en una carretilla. Su nueva rutina consiste en tomar moneda por moneda y limpiarlas con una solución de jabón para platos, vinagre y agua, aunque refiere que es un proceso difícil pues le toma alrededor de hora y media limpiar un puñado de centavos.