Gómez Palacio, Durango.- Lo que antes fueron compras de pánico que llevó al desabasto a la mayoría de los comercios por la pandemia, hoy, sólo es incertidumbre y tristeza por el inminente cierre de algunos.
Entre ellos, se encuentra la industria panificadora de Gómez Palacio, en donde las ventas se han reducido hasta en un 60% y que por supuesto, le ha pegado a miles de trabajadores.
Gerardo Bañuelos Garza, quien anteriormente fabricaba diversidad de piezas de pan de dulce y blanco, dijo que es urgente conciliar un apoyo ante el gobierno federal, antes de que este tipo de comercios hagan crisis.
Hoy, se dedica a la elaboración de pan para hamburguesas, no obstante, afirma la venta tuvo una caída estrepitosa, ya que tres meses atrás, vendía de mil a mil 300 piezas y en lo que va de febrero, marzo y parte de abril, apenas coloca 120 y los sábados y domingos 150, ya que las familias acostumbran este producto como complemento de cena.
"Tenemos que sortear otros gastos prioritarios y dejar para después los consumos que no sean necesarios, mientras pasa esta crisis sanitaria que cierto, pega a todos, pero que lastima económicamente a las empresas vulnerables, cuyos propietarios viven al día y tienen que pagar de cinco a diez empleados, sin olvidar el costo de energía eléctrica, sueldos, agua, impuestos, Imss, entre otros", subrayó.
Y aunque esta pandemia obligaría a muchos a cerrar por la eminente quiebra que se avizora, por su parte Bañuelos Garza, espera "capear el temporal" ya que el fin de la contingencia podría ser después del mes del 20 de junio "y mientras, a gastar los ahorros y seguir fabricando nuestro pan, y por supuesto buscar mayores clientes llevándolo a domicilio cumpliendo con las medidas sanitarias, porque sólo así podremos subsistir".
Sostuvo que sin un centro de trabajo, será difícil mantener a la familia y que a pesar de bajar sus ventas y a punto del cierre, le apuesta a la voluntad de Dios, porque confía en soportar los embates financieros que provoca el Covid-19.
Pero apunta, que de no ceder pronto esta contingencia, para otros habrá serios problemas de subsistencia y por ello es urgente que se conciliar un apoyo financiero, "porque creo que no han volteado hacia este lado".
"Cierto es que hace dos meses en que no se tienen los suficientes ingresos, y apretar el cinturón otros dos, nos llevaría a la ruina", expuso.
Comentó Bañuelos Garza, que principalmente abastece a los puestos de hamburguesas y un 30 por ciento a los domicilios para las fiestas o reuniones familiares, pero hoy que el Covid-19 sigue presente, el consumo cayó.
En este municipio hay cuando menos 80 panaderías que dan empleo directo a 3800 personas que practican este oficio y crea algunos 1200 indirectos, no obstante, el número se encuentra a menos de la mitad.
"Seguiremos trabajando sobre pedido con la esperanza que muy pronto se pailen los efectos de este virus, el cual sin duda vino a darle una sacudida al mundo", puntualizó.
