Torreón, Coahuila.- Pasión, sueños y moda, son las palabras que podrían describir a Kenia Herrera y Claudia González Romero, mujeres laguneras que se atrevieron a concretizar sus deseos y llevar a cabo un proyecto pese a las adversidades; las chicas comenzaron con una maleta repleta de ropa, sus amigas las principales clientas, sus casas la bodega y su amor por lo fashion le daban vida a Dúo ShowRoom.
Kenia y Claudia tienen 30 años de amistad y 15 de socias, el respeto, las ganas de crecer, el juntas ser una misma, han sido la base del éxito, “es tan padre tener una socia, nadie nos entiende, solo ella y yo entendemos en el mismo idioma”, dijo González Romero.
Al quedarse Kenia sin trabajo Claudia le propuso ser socias y comenzar con el sueño, “yo toda mi vida he vendido, le dije si usted tiene amigas y yo tengo amigas, tenemos clientas y podemos hacer mucho”, dijo Claudia, durante más de cinco años se dedicaron a vender ropa en una maleta, realizaban Open House y en las quincenas pasaban casa por casa para cobrar.
En esos años atravesaron distintas circunstancias, Claudia se fue a otro país, Kenia tenía un trabajo godín de ocho horas, pero aun así se mantenían firmes en avanzar, ser felices y trabajar, “terminaba mi jornada de trabajo y me ponía a vender”, “todos los días soñaba en tener nuestra tienda”, contaron las chicas.
Fue en 2009 cuando proyecto se concretó y la tienda física se construyó, Dúo ShowRoom nació en Senderos, exactamente fuera de toda zona comercial, se convirtió en un lugar donde el mundo de la moda se hacía presente en cada prenda, zapato o accesorio y fue un éxito rotundo.
Respecto a los retos que enfrentaron como mujeres emprendedoras, Kenia manifestó que al ser mamá soltera su reto fue el arriesgarse a empezar el proyecto, pues la incertidumbre de saber si podría tener las ganancias para sacar adelante a su hija estaba presente, “no tenía seguro lo que iba a ganar pero dije voy tras nuestro sueño”.
“Para mí el reto era saber si iba a venir gente y si sacaríamos para la renta”, dijo Claudia, pero el buen ojo y el gusto las llevó a concretizar el gran sueño, lograron que durante dos años las clientas de Gómez Palacio, Torreón y Lerdo acudieran hasta Senderos.
Gracias al gran éxito que estaban teniendo hubo un momento donde el local en aquella zona residencial ya les quedaba pequeño, por lo que decidieron mudarse al número seis de la plaza City Galerías que se encuentra sobre el periférico, “llegó un momento donde también nos quedó chico y tuvimos que ampliarnos a otro”.
Las gratificaciones que Dúo ShowRoom les ha dejado es el darse cuenta que a pesar de reto tras reto, de los momentos donde se quieren caer o saber que abrieron otra tienda, han podido juntas seguir adelante.
“Una satisfacción es de que muchas clientas se han hecho nuestras amigas, de que tenemos la oportunidad de ser agentes de cambio, llegan con baja autoestima y tenemos la oportunidad de poder darles cariñitos y empoderarlas, poder ser sus amigas y consejeras”, comentó Kenia.
“A nosotras no nos han dado nada, desde abajo hemos picado piedra y el que nos reconozcan es de gran satisfacción”, dijo Claudia, las chicas gracias a su proyecto y amor por la moda han sido portadas de importantes revistas locales, han estado presentes en Fashion Weeks en distintas ciudades y han organizado pasarelas de moda en la ciudad.
Sus consejos para aquellos quienes tienen un sueño son el hacerle caso a su intuición, “cuando sientes el momento en el que te están moviendo todo, que no estás a gusto en tu trabajo, que tienes un sueño, que has querido hacer algo pero no lo has podido hacer porque estás trabajando para un horario o para un jefe, y tienes intuición, es el momento de hacerlo”, resaltó Kenia.
Es importante que los sueños se plasmen, se escriban, se cristalicen, se les ponga nombre y fecha, “hazlo porque igual y en un futuro mueres o vas a estar viejo y vas a decir lo pude haber hecho, el hubiera no ya no existe”, dijo Claudia.
Se puede empezar a trabajar de a poco, los fines de semana, “empiézalo en chiquito pero suéñalo en grande”, señaló Kenia.
