/ viernes 21 de agosto de 2020

W. Churchill, Promotor de la Unidad Europea

Sir Winston Leonard Spencer Churchill, fue el notable estadista inglés que logró la unidad de los países aliados en la Segunda Guerra Mundial, alcanzando así el triunfo sobre la Alemania Nazi, que encabezaba Adolf Hitler.

Nuestro personaje de hoy nació en Blenheim Castle, Oxford, de Gran Bretaña, en el año de 1874, siendo sus padres lord Raldoph Henry Churchill y Jennie Jerome, hija de un financiero estadounidense, que durante un tiempo fue dueño del afamado diario The New York Times.

Cursó estudios en la Real Academia Militar de Sandhurst, donde se graduó de oficial en 1895, participando en el ejército en las campañas de Sudán, Cuba y Sudáfrica. Permaneció dos años en la India y Egipto.

Como corresponsal de guerra de un diario londinense, presenció la guerra contra los colonos holandeses en África, pero en 1899 renuncia a la milicia para dedicarse a la política en su nación, presentándose como candidato al parlamento por el Partido Conservador Lograr sin ser electo, pero insiste en 1901 y es cuando logra su propósito gracias a su elocuencia en la tribuna.

Insatisfecho por la política de Joseph Chamberlain, Churchill pasa al Partido Liberal y en 1906 es electo diputado; dos años más tarde ocupa el cargo de Ministro de Comercio y en 1910 el de Ministro del Interior. Un año más tarde es nombrado Primer Lord del Almirantazgo, procediendo a la reorganización de la marina inglesa, armando a las naves con cañones modernos y formando una fuerza aérea de apoyo a los barcos de guerra.

Sin embargo, una vez iniciada la Primera Guerra Mundial fracasó en la campaña de los Dardanelos, pues resultó un desastre para las fuerzas del Reino Unido, motivo por el cual renuncia y se reincorporara al ejército en 1916; al año siguiente el Primer Ministro lo llama para encomendarle el Ministerio de Municiones; en 1918 es nombrado Ministro de Guerra, y como tal promueve el desarrollo de carros militares blindados, mejor conocidos como tanques de guerra.

Terminada la I Guerra Mundial se convirtió en Ministro de las Colonias y a su vez trata de crear un partido independiente de corte anti socialista, sin poder lograrlo, por lo que regresa a las filas del Partido Conservador, pero en 1924 es electo nuevamente diputado. Dadas sus cualidades como financiero es nombrado titular del Ministerio de Hacienda, y cinco años después nuevamente electo diputado.

Arthur Neville Chamberlain, hijo político de Joseph Chamberlain, fue Primer Ministro del Reino Unido entre 1937 y 1940, quien inocentemente creyó en podeer lograr la paz en Europa, y para ello se reunió con Adolf Hitler y con Benito Mussolini en 1938, firmando con ellos el Tratado de Münich, que resultó ser una farsa pues un año más tarde Alemania invade primero Checoeslovaquia y en seguida Polonia.

El Parlamento inglés consideró el tratado firmado por Chamberlain como una claudicación de su país frente a los alemanes y no un tratado de paz; para ello se tomaron las precauciones necesarias, a la vez que es nombrando Churchill como Primer Lord del Almirantazgo, que equivale al cargo de jefe máximo del Gabinete de Guerra; un año más tarde, dimite Arthur Neville como Primer Ministro, ocupando el puesto Winston Churchill.

Para entonces ya había estallado la II Guerra Mundial en Europa, y por ello se incrementó el reclutamiento en Gran Bretaña y sus colonias, así como la producción de armamento y diversas construcciones navales, en tanto que Churchill inicia un acercamiento secreto con el gobierno de Estados Unidos de América, consiguiendo la colaboración total de ese país tras de ser nuevamente reelecto Franklin Delano Roosevelt.

En 1942 modifica su gabinete, dando un giro a la izquierda y estrecha sus relaciones con la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), y para ello se reúne con José Stalin en Moscú, y al año siguiente se entrevista con Roosevelt en Washington.

En 1944 las tropas aliadas desembarcan en Normandía, Francia, y de esa manera se inicia la destrucción del ejército Nazi en Europa. Aniquilada la Fuerza del Eje, se celebra la célebre Conferencia de Yalta en 1945, donde Churchill, Stalin y Roosevelt, trazan los planes que habrán de regir a Europa en la post guerra, anotándose el Primer Ministro inglés un triunfo al eliminar a Francia de la junta y de las decisiones allí tomadas.

En 1947 concreta su doctrina de la “Unidad Europea” y la lanza en un manifiesto que causó malestar a diversos gobiernos, pero especialmente a rusos y franceses, si bien éstos últimos harán posteriormente una réplica al ser creada la Comunidad Económica Europea y dejar excluida a Inglaterra.

Pasada la euforia de la guerra, Winston Churchill vuelve a ser Primer Ministro del Reino Unido, y cabeza de un gobierno conservador en 1951. Dos años más tarde obtiene el Premio Nobel de Literatura y acepta también la Orden de la Jarretera que antes había rechazado, para luego presentar su renuncia al cargo de Primer Ministro.

En 1963 fue nombrado Ciudadano de Honor de los Estados Unidos de América y al año siguiente se retira también de la Cámara de los Comunes, donde seguía participando hasta ese entonces. Deja de existir en 1965 en Londres a los 71 años de edad.

Churchill fue siempre un hombre de acción, intransigente respecto a su ideología, poco tolerante con sus opositores, un elocuente orador y un hombre de gran valor frente al peligro.

Aparte de escribir varios libros, que le valieron obtener el Premio Nobel de Literatura, también cultivó la pintura, dejando algunos cuadros bien logrados, según la opinión de críticos del arte.

El texto completo del epígrafe que aparece arriba de este artículo biográfico, es el siguiente: “No interrogues a tus razonamientos, que sólo pueden contestarte con palabras; vuélvete hacia el mundo con actos a fin de que te responda con certezas” (de su obra “Pensamientos y aventuras”).

¡Hasta la próxima!

Sir Winston Leonard Spencer Churchill, fue el notable estadista inglés que logró la unidad de los países aliados en la Segunda Guerra Mundial, alcanzando así el triunfo sobre la Alemania Nazi, que encabezaba Adolf Hitler.

Nuestro personaje de hoy nació en Blenheim Castle, Oxford, de Gran Bretaña, en el año de 1874, siendo sus padres lord Raldoph Henry Churchill y Jennie Jerome, hija de un financiero estadounidense, que durante un tiempo fue dueño del afamado diario The New York Times.

Cursó estudios en la Real Academia Militar de Sandhurst, donde se graduó de oficial en 1895, participando en el ejército en las campañas de Sudán, Cuba y Sudáfrica. Permaneció dos años en la India y Egipto.

Como corresponsal de guerra de un diario londinense, presenció la guerra contra los colonos holandeses en África, pero en 1899 renuncia a la milicia para dedicarse a la política en su nación, presentándose como candidato al parlamento por el Partido Conservador Lograr sin ser electo, pero insiste en 1901 y es cuando logra su propósito gracias a su elocuencia en la tribuna.

Insatisfecho por la política de Joseph Chamberlain, Churchill pasa al Partido Liberal y en 1906 es electo diputado; dos años más tarde ocupa el cargo de Ministro de Comercio y en 1910 el de Ministro del Interior. Un año más tarde es nombrado Primer Lord del Almirantazgo, procediendo a la reorganización de la marina inglesa, armando a las naves con cañones modernos y formando una fuerza aérea de apoyo a los barcos de guerra.

Sin embargo, una vez iniciada la Primera Guerra Mundial fracasó en la campaña de los Dardanelos, pues resultó un desastre para las fuerzas del Reino Unido, motivo por el cual renuncia y se reincorporara al ejército en 1916; al año siguiente el Primer Ministro lo llama para encomendarle el Ministerio de Municiones; en 1918 es nombrado Ministro de Guerra, y como tal promueve el desarrollo de carros militares blindados, mejor conocidos como tanques de guerra.

Terminada la I Guerra Mundial se convirtió en Ministro de las Colonias y a su vez trata de crear un partido independiente de corte anti socialista, sin poder lograrlo, por lo que regresa a las filas del Partido Conservador, pero en 1924 es electo nuevamente diputado. Dadas sus cualidades como financiero es nombrado titular del Ministerio de Hacienda, y cinco años después nuevamente electo diputado.

Arthur Neville Chamberlain, hijo político de Joseph Chamberlain, fue Primer Ministro del Reino Unido entre 1937 y 1940, quien inocentemente creyó en podeer lograr la paz en Europa, y para ello se reunió con Adolf Hitler y con Benito Mussolini en 1938, firmando con ellos el Tratado de Münich, que resultó ser una farsa pues un año más tarde Alemania invade primero Checoeslovaquia y en seguida Polonia.

El Parlamento inglés consideró el tratado firmado por Chamberlain como una claudicación de su país frente a los alemanes y no un tratado de paz; para ello se tomaron las precauciones necesarias, a la vez que es nombrando Churchill como Primer Lord del Almirantazgo, que equivale al cargo de jefe máximo del Gabinete de Guerra; un año más tarde, dimite Arthur Neville como Primer Ministro, ocupando el puesto Winston Churchill.

Para entonces ya había estallado la II Guerra Mundial en Europa, y por ello se incrementó el reclutamiento en Gran Bretaña y sus colonias, así como la producción de armamento y diversas construcciones navales, en tanto que Churchill inicia un acercamiento secreto con el gobierno de Estados Unidos de América, consiguiendo la colaboración total de ese país tras de ser nuevamente reelecto Franklin Delano Roosevelt.

En 1942 modifica su gabinete, dando un giro a la izquierda y estrecha sus relaciones con la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), y para ello se reúne con José Stalin en Moscú, y al año siguiente se entrevista con Roosevelt en Washington.

En 1944 las tropas aliadas desembarcan en Normandía, Francia, y de esa manera se inicia la destrucción del ejército Nazi en Europa. Aniquilada la Fuerza del Eje, se celebra la célebre Conferencia de Yalta en 1945, donde Churchill, Stalin y Roosevelt, trazan los planes que habrán de regir a Europa en la post guerra, anotándose el Primer Ministro inglés un triunfo al eliminar a Francia de la junta y de las decisiones allí tomadas.

En 1947 concreta su doctrina de la “Unidad Europea” y la lanza en un manifiesto que causó malestar a diversos gobiernos, pero especialmente a rusos y franceses, si bien éstos últimos harán posteriormente una réplica al ser creada la Comunidad Económica Europea y dejar excluida a Inglaterra.

Pasada la euforia de la guerra, Winston Churchill vuelve a ser Primer Ministro del Reino Unido, y cabeza de un gobierno conservador en 1951. Dos años más tarde obtiene el Premio Nobel de Literatura y acepta también la Orden de la Jarretera que antes había rechazado, para luego presentar su renuncia al cargo de Primer Ministro.

En 1963 fue nombrado Ciudadano de Honor de los Estados Unidos de América y al año siguiente se retira también de la Cámara de los Comunes, donde seguía participando hasta ese entonces. Deja de existir en 1965 en Londres a los 71 años de edad.

Churchill fue siempre un hombre de acción, intransigente respecto a su ideología, poco tolerante con sus opositores, un elocuente orador y un hombre de gran valor frente al peligro.

Aparte de escribir varios libros, que le valieron obtener el Premio Nobel de Literatura, también cultivó la pintura, dejando algunos cuadros bien logrados, según la opinión de críticos del arte.

El texto completo del epígrafe que aparece arriba de este artículo biográfico, es el siguiente: “No interrogues a tus razonamientos, que sólo pueden contestarte con palabras; vuélvete hacia el mundo con actos a fin de que te responda con certezas” (de su obra “Pensamientos y aventuras”).

¡Hasta la próxima!