La presencia y participación de personajes laguneros en diversas etapas de la vida nacional mexicana no ha sido exclusiva de la llamada época de la reforma, pues un gran número de ellos tuvo presencia y acción en la llamada época revolucionaria en la que no pocos ofrendaron su vida por el triunfo de la causa en que intervenían. Hoy trataremos de uno de ellos quien desde antes que estallara el gran movimiento revolucionario, intervino en los prolegómenos de tal levantamiento, primero en las reuniones previas que se dieron para dar a conocer principalmente el pensamiento de quien fuera el mártir de la democracia en México.
El personaje a quien hoy nos referiremos fue originario de la Vega del Marrufo hoy Matamoros Coahuila, en donde nació un día que no ha sido precisado en el año de 1856 siendo hijo de don Cruz Ugalde y doña Camila Guillen a quien le impusieron el nombre de Sixto Ugalde Guillen. Desde un principio en el año de 1910 participó en las reuniones en donde se conspiraba en contra de Porfirio Díaz siendo designado el día 15 de noviembre de 1910 por instrucciones de don Francisco I. Madero oficial del ejército republicano.
Como represalia por la designación que las fuerza revolucionarias le hicieron, las autoridades federales procedieron a detener y poner en prisión a dos de sus hijos, uno de ellos al encontrarse enfermo en el momento de su detención fue dejado en libertad y al otro lo tuvieron en prisión un mes. Dentro de sus acciones debemos destacar su participación en las juntas previas al levantamiento del 20 de noviembre de 1910. En la población de San Pedro de las Colonias Coahuila, procedió a unirse a las fuerzas de Benjamín Argumedo y don Emilio Madero.
A partir del momento de la unión de nuestro personaje con Jesús Agustín Castro, Orestes Pereyra, Epitacio Rea y Gregorio García, fueron reconocidos como los rebeldes laguneros que iniciaron formalmente el movimiento revolucionario en los estados de Coahuila y Durango, habiendo participado Argumedo en varias acciones bélicas bajo el mando de Sixto Ugalde Guillen. Nuestro personaje participó en un gran número de combates que los revolucionarios bajo el sistema de guerra de guerrillas implementaron en Coahuila, Durango y Zacatecas. Es de resaltar el hecho de que don Sixto Ugalde para la fecha en la que se unió a la revolución contaba con 50 años de edad.
En la primera toma de Torreón a nuestro personaje le correspondió atacar por los márgenes del rio Nazas y la casa Colorada. Las tropas al mando de nuestro personaje cumplieron a cabalidad la parte que previamente les habían ordenado realizar, de tal manera que fueron factor más que decisivo para el que 15 de mayo de 1911 los revolucionarios maderistas llevaran a cabo la primera toma de Torreón, con lo que juntamente con los acontecimientos de ciudad Juárez doblegaron a Porfirio Díaz a renunciar a la Presidencia de la República. Don Sixto Ugalde Guillen, después de la batalla de Torreón fue ascendido al grado de coronel y en el año de 1914 fue ascendido al grado de General Brigadier firmando su nombramiento don Eugenio Aguirre Benavides en su carácter de Ministro de Guerra.
Debido a su edad nuestro personaje se ocupo de labores administrativas en la Secretaría de Guerra, cabe mencionara que sufrió varios encarcelamientos y en uno de ellos coincidió con la guerrillera sanpetrina Petra Herrera. El 16 de diciembre de 1917 víctima de una neumonía falleció don Sixto Ugalde Guillen en la ciudad de México, y fue sepultado en el panteón de San Francisco de Matamoros, Coahuila.
