Entre más poder adquiere el hombre deja de escuchar y solo ve por sus propios intereses, aquel alpinista había llegado a la etapa más alta para conquistar aquel pico del Everest, un lugar poco transitable, él sabía que a la cumbre no se llega solo, más sin embargo no quiso escuchar, los últimos 1200 metros se conocen como la zona de la muerte, los pulmones no reciben el oxígeno suficiente y las células empiezan a morir, y el cuerpo ya no puede aclimatarse y puede empezar a desvariar y decir coherencias. Algo parecido puede suceder a las personas con ciertos cargos de “altura” no saben manejar sus emociones ni sus sentimientos, llámense, lideres, gerentes, funcionarios públicos, ministros religiosos, padres de familia, o cualquier persona hombre o mujer que ha adquirido poder, ya sea por su esfuerzo propio o por herencia, la caída de las alturas puede ser tan grave que muy pocos pueden volver a levantarse, tres historias que nos harán reflexionar al estar en una posición de altura. 1. UN SERAFÍN LLAMADO LUCERO de la mañana quiso usurpar el trono de Dios: Pues te decías a ti mismo: “Subiré al cielo para poner mi trono por encima de las estrellas de Dios. Voy a presidir en el monte de los dioses, muy lejos en el norte. Escalaré hasta los cielos más altos y seré como el Altísimo”. En cambio, serás bajado al lugar de los muertos, a las profundidades más hondas. ¡Cómo has caído del cielo, oh estrella luciente, hijo de la mañana! Has sido arrojado a la tierra, tú que destruías a las naciones del mundo. Isaías 14:13-15. Sentenciada cadena perpetua.
2. El Rey David el momento al estar viendo por la terraza, vio a una mujer que se bañaba y la deseo, e inmediatamente, entro el deseo insano por poseerla y le mandó llamar, le dijo al siervo ¿quién es esa mujer? Y no escuchó, lo que se le dijo; se llama Betsabé está casada y su esposo es de uno de tus generales, era el rey era la máxima autoridad puesta por Dios ¿quién se le podía negar? Y cometió adulterio y por un poco tiempo escondió su relación hasta que Dios le envió al profeta Natán, para que le contara a David la siguiente historia: Había dos hombres en cierta ciudad; uno era rico y el otro, pobre. El hombre rico poseía muchas ovejas, y ganado en cantidad. El pobre no tenía nada, solo una pequeña oveja que había comprado. Él crio esa ovejita, la cual creció junto con sus hijos. La ovejita comía del mismo plato del dueño y bebía de su vaso, y él la acunaba como a una hija. Cierto día llegó una visita a la casa del hombre rico. Pero en lugar de matar un animal de su propio rebaño o de su propia manada, tomó la ovejita del hombre pobre, la mató y la preparó para su invitado. Entonces David se puso furioso. ¡Tan cierto como que el Señor vive juró, cualquier hombre que haga semejante cosa merece la muerte! Debe reparar el daño dándole al hombre pobre cuatro ovejas por la que le robó y por no haber tenido compasión. Entonces Natán le dijo a David: ¡Tú eres ese hombre! El Señor, Dios de Israel, “Lo que tú hiciste a escondidas, yo lo haré a plena luz, a la vista de todo Israel” todo mundo lo sabrá. Sentenciado y perdonado después que pidió perdón Salmo 51. No os engañéis; DIOS NO PUEDE SER BURLADO: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará.
Los hechos lamentables ocurridos últimamente ventilados a nivel mundial han lastimado a una sociedad, a una congregación, pero quien quiera usurpar el lugar de Dios atribuyéndose funciones que no les corresponde tendrá su castigo a su debido tiempo.
3. El siguiente personaje solo dejo la liga: https://www.youtube.com/watch?v=7GGQ3bzGZyw y si esto no es idolatría usurpando un lugar, la caída es mucho más peligrosa cuando los hombres “lo aman con el alma y con el corazón”: Así dice el SEÑOR: ¡Maldito el hombre que confía en el hombre! ¡Maldito el que se apoya en su propia fuerza y aparta su corazón del SEÑOR!
El juez Cohen antes de emitir su voto de sentencia levanta su martillo y con un gran lamento después de escuchar testimonios desgarradores de mujeres y hombres afectadas de este juicio dijo: “yo he sido juez por mucho tiempo, 38 años y nunca deja de sorprenderme, las cosas que hacen algunas gentes en nombre de la religión y como se arruinan vidas, bajo el velo de servir a un ser supremo, en este momento mis manos están atadas, los abogados hacen lo que hacen, pero quiero decirles que el mundo las ha escuchado se los seguro en cuanto a los miembros de las familias que han abandonado a testigos ¡qué vergüenza!, ¡qué vergüenza! En cuanto al acusado le digo: ¡Usted es un depredador Sexual! Se le condena a cárcel a un periodo de 16 años y ocho meses de cárcel. ¿Sentenciado o simulación? Dios nos libre de caer en este mismo pecado. hotemadavid@hotmail.com
