/ lunes 3 de junio de 2019

Rincón Beisbolero

Por: Claudio Martínez Silva

Tiempo de resignación

Algodoneros estará a partir de este martes, tres días en Saltillo para una serie demasiado importante; la distancia entre ambos equipos es de cinco juegos, con seis por disputarse entre ellos, pero Unión Laguna hoy debe enfocarse en abandonar el sótano de la Zona Norte. El equipo de Jonathan Aceves no ha podido ganar series, el pitcheo de relevo ha sido su Talón de Aquiles y si se trata de ver las cosas con objetividad, es muy complicado que se logre el boleto para el play off, ya que existe desde ya una obligación de finalizar líder o sublíder del Norte en la segunda vuelta. Para algunos los objetivos del equipo se han cumplido, principalmente tener béisbol en esta plaza.

Si bien es cierto que este juego se llama pitcheo, también es cierto que para aspirar a cosas importantes se necesita ser consistente, y Algodoneros lo ha sido, pero para encontrar las derrotas. Se hizo mucho ruido al barrer aquí a Sultanes y ganar series en Puebla y Tijuana, pero si hoy se voltea a ver el standing, todos esos equipos aparecen en zona de play off, a diferencia de Algodoneros; como se dice coloquialmente “una golondrina no hace verano. Quienes siguen detenidamente el accionar de Unión Laguna, pueden encontrar algunas razones para explicar la actuación del equipo, a todas luces mala, en cuanto a resultados.

Este equipo cuenta con elementos jóvenes de mucha calidad, pero que aún no están listos para cargar el peso de un equipo de la Liga Mexicana de Beisbol (LMB); Edgar Robles, Ciro Norzagaray, Missael Rivera, Daniel Mercado, Enrique Pérez, Adrián Gutiérrez, Abraham López, Edgar Martínez, Juan Macías, Saúl Castellanos, Luis Gámez, José Frutos, Miguel Esparza y Edgar Gómez son elementos de indudable talento, pero faltos de camino recorrido para afianzarse en una liga tan competitiva; esta base mexicana es bien apoyada por elementos como Francisco Rivera, Óscar Sanay, Francisco Ferreiro y Edgar Osuna, pero se requiere complementar con extranjeros extraordinarios, y Unión Laguna sólo tiene dos.

Cuando el pitcher rival es zurdo, Jonathan Aceves suele hacer varios ajustes en el orden al bate, pero en un equipo con estas características, esas cosas no se pueden hacer, ya que elementos como Francisco Rivera, Edgar Robles y Óscar Sanay deben jugar todos los días. El domingo se vio a un Dustin Geiger errático en primera base, cuando él es muy efectivo en tercera; Francisco Ferreiro enseñó que no es un jardinero central y Daniel Hinojosa se esforzó para cubrir una posición que no es la suya, la de jardinero derecho. La intención es fortalecer la ofensiva ante lanzador zurdo, pero el precio es muy alto, ya que esos ajustes crean muchos problemas defensivos.

Este equipo necesita mucho más de extranjeros como José Domínguez, Pedro Fernández, Dustin Geiger y Niuman Romero; Frankie de la Cruz y Frank Garcés han cumplido con creces y el panameño Edgard Muñoz es un elemento cumplidor; Yohan Flande tiene mucho más de lo que hay enseñado y el zurdo dominicano pronto debe estar en la rotación de abridores. Hay quien asegura que no es fácil encontrar refuerzos de calidad y eso es cierto, pero entonces surge la pregunta de ¿cómo hizo Sultanes para encontrar a Elian Leyva, o Monclova en el caso de Chris Carter. El único argumento válido es que el presupuesto no alcance para ese tipo de refuerzos.

Ahora se han escuchado versiones que culpan al calendario regular de la marcha de Algodoneros; que les tocaron los rivales más complicados y que no se han visto las caras con tal o cual equipo; para ser protagonista hay que encarar y vencer a los equipos más fuertes, y no se les puede evitar, ya que tarde o temprano llegará el momento de encararlos. La segunda vuelta del calendario pondrá a Unión Laguna ante Durango, Aguascalientes, Tabasco, Tigres y Campeche; entonces será la hora de aprovechar a esos ¿rivales débiles? Este equipo está plagado de excelente talento nacional y buenos mexicanos de experiencia; el aporte extranjero es el que ha quedado a deber.

claudiobeisbol58@gmail.com

Por: Claudio Martínez Silva

Tiempo de resignación

Algodoneros estará a partir de este martes, tres días en Saltillo para una serie demasiado importante; la distancia entre ambos equipos es de cinco juegos, con seis por disputarse entre ellos, pero Unión Laguna hoy debe enfocarse en abandonar el sótano de la Zona Norte. El equipo de Jonathan Aceves no ha podido ganar series, el pitcheo de relevo ha sido su Talón de Aquiles y si se trata de ver las cosas con objetividad, es muy complicado que se logre el boleto para el play off, ya que existe desde ya una obligación de finalizar líder o sublíder del Norte en la segunda vuelta. Para algunos los objetivos del equipo se han cumplido, principalmente tener béisbol en esta plaza.

Si bien es cierto que este juego se llama pitcheo, también es cierto que para aspirar a cosas importantes se necesita ser consistente, y Algodoneros lo ha sido, pero para encontrar las derrotas. Se hizo mucho ruido al barrer aquí a Sultanes y ganar series en Puebla y Tijuana, pero si hoy se voltea a ver el standing, todos esos equipos aparecen en zona de play off, a diferencia de Algodoneros; como se dice coloquialmente “una golondrina no hace verano. Quienes siguen detenidamente el accionar de Unión Laguna, pueden encontrar algunas razones para explicar la actuación del equipo, a todas luces mala, en cuanto a resultados.

Este equipo cuenta con elementos jóvenes de mucha calidad, pero que aún no están listos para cargar el peso de un equipo de la Liga Mexicana de Beisbol (LMB); Edgar Robles, Ciro Norzagaray, Missael Rivera, Daniel Mercado, Enrique Pérez, Adrián Gutiérrez, Abraham López, Edgar Martínez, Juan Macías, Saúl Castellanos, Luis Gámez, José Frutos, Miguel Esparza y Edgar Gómez son elementos de indudable talento, pero faltos de camino recorrido para afianzarse en una liga tan competitiva; esta base mexicana es bien apoyada por elementos como Francisco Rivera, Óscar Sanay, Francisco Ferreiro y Edgar Osuna, pero se requiere complementar con extranjeros extraordinarios, y Unión Laguna sólo tiene dos.

Cuando el pitcher rival es zurdo, Jonathan Aceves suele hacer varios ajustes en el orden al bate, pero en un equipo con estas características, esas cosas no se pueden hacer, ya que elementos como Francisco Rivera, Edgar Robles y Óscar Sanay deben jugar todos los días. El domingo se vio a un Dustin Geiger errático en primera base, cuando él es muy efectivo en tercera; Francisco Ferreiro enseñó que no es un jardinero central y Daniel Hinojosa se esforzó para cubrir una posición que no es la suya, la de jardinero derecho. La intención es fortalecer la ofensiva ante lanzador zurdo, pero el precio es muy alto, ya que esos ajustes crean muchos problemas defensivos.

Este equipo necesita mucho más de extranjeros como José Domínguez, Pedro Fernández, Dustin Geiger y Niuman Romero; Frankie de la Cruz y Frank Garcés han cumplido con creces y el panameño Edgard Muñoz es un elemento cumplidor; Yohan Flande tiene mucho más de lo que hay enseñado y el zurdo dominicano pronto debe estar en la rotación de abridores. Hay quien asegura que no es fácil encontrar refuerzos de calidad y eso es cierto, pero entonces surge la pregunta de ¿cómo hizo Sultanes para encontrar a Elian Leyva, o Monclova en el caso de Chris Carter. El único argumento válido es que el presupuesto no alcance para ese tipo de refuerzos.

Ahora se han escuchado versiones que culpan al calendario regular de la marcha de Algodoneros; que les tocaron los rivales más complicados y que no se han visto las caras con tal o cual equipo; para ser protagonista hay que encarar y vencer a los equipos más fuertes, y no se les puede evitar, ya que tarde o temprano llegará el momento de encararlos. La segunda vuelta del calendario pondrá a Unión Laguna ante Durango, Aguascalientes, Tabasco, Tigres y Campeche; entonces será la hora de aprovechar a esos ¿rivales débiles? Este equipo está plagado de excelente talento nacional y buenos mexicanos de experiencia; el aporte extranjero es el que ha quedado a deber.

claudiobeisbol58@gmail.com