/ miércoles 18 de octubre de 2017

Rincón Beisbolero

Si hoy arrancara la nueva temporada de la Liga Mexicana de Beisbol (LMB), la competencia se realizaría con 15 equipos, luego de que la asamblea del circuito decidió enviar a los Generales de Durango a un año sabático. A pesar de eso la Zona Norte contaría con ocho escuadras, ya que los Rojos del Águila de Veracruz se mudan a Nuevo Laredo, quienes forzosamente serán ubicados en el grupo norteño. La Zona Sur aparentemente quedaría con siete equipos, aunque no se descarta que los Diablos Rojos del México regresen al grupo en que deben estar, de acuerdo a la ubicación geográfica de la Ciudad de México. Se estima difícil jugar la temporada 2018 con 15 equipos y se ve muy probable que Durango sí sea incluido, una vez que la directiva ya cubrió los adeudos que tenía pendientes con la liga, además de tener el apoyo total del gobierno del estado, de acuerdo a lo dicho por el propio José Rosas Aispuro.

Lo cierto es que a Javier Salinas, nuevo titular de la LMB le tocó “bailar con la más fea” pues su llegada al frente del circuito se dio en momentos de gran turbulencia y en plena transición, cuando el grupo en el poder es completamente nuevo, con Gerardo Benavides Pape, como el hombre que lleva la voz cantante, secundado por Alberto Uribe y los hermanos Erick y Juan José Arellano Hernández. Javier Salinas necesita todo el apoyo del grupo en el poder porque su conocimiento del beisbol es escaso, él como experto en Mercadotecnia tiene la encomienda específica de hacer que la liga sea atractiva para los empresarios, así como conseguir recursos que permitan sobre todo a los equipos chicos, operar sin problemas durante la temporada, máxime que la de 2018 será mucho más larga que en años anteriores.

Javier Salinas en sus declaraciones suena demasiado optimista sobre el futuro de la LMB; el directivo asegura que la multipropiedad es positiva, dice que la intervención de los gobiernos en los equipos no sólo es necesaria, sino productiva; en la misma forma acepta que la liga actualmente investiga el caso de los prospectos de ligas mayores que los Diablos Rojos del México arrebataron a los Tigres de Quintana Roo, justo antes de que Carlos Peralta Quintero vendiera la franquicia a un grupo de empresarios que encabeza “El Toro” Fernando Valenzuela. Quizá sea lógico el optimismo de Javier Salinas, pero es indudable que él no toma las decisiones importantes y que está muy lejos de conocer a fondo los principales problemas que desde hace varios años aquejan al nonagenario circuito de verano.

De manera clara y contundente Salinas ha dicho que la LMB sí va a permitir que sigan los movimientos múltiples de jugadores entre equipos de un mismo propietario, como los que descaradamente hicieron este año Monclova y Puebla, así como Yucatán y Unión Laguna. Salinas afirma que esos cambios no son ni la cuarta parte de los movimientos entre equipos que se hacen de cara a una temporada. Se antoja maravilloso encontrar una persona que ocupe el cargo que dejó Plinio Escalante y que sea tan optimista, que asegure que en la LMB todo marcha sobre ruedas y que algunos medios de comunicación suelen exagerar al referirse a los muchos problemas existentes y que urge solucionarlos por el beneficio del circuito de verano. Estamos entonces, en la antesala de la mejor temporada de los últimos 35 años.

Mientras tanto de la oficina de Vaqueros Laguna en Torreón, nos informan que Francisco Méndez ya se encuentra en su casa de Caborca, junto con su familia. Apenas el pasado 12 de septiembre la directiva de Unión Laguna informó que el “Chiper” se haría cargo de la Gerencia Deportiva, de cara a la temporada 2018. Méndez Suárez se desempeñó como Gerente Deportivo toda la temporada 2017, por lo que ahí existe una imprecisión, como en el caso de David Cárdenas Cortés, del que se dijo, dejaba su cargo como Gerente Deportivo, cuando el cargo de este personaje era el de Gerente General. El viaje de Francisco Méndez, junto con su familia a Caborca, es otro indicio de que en la oficina de la organización lagunera están por darse muchos movimientos, en los cuales ya tendrá injerencia el nuevo propietario, del que la afición lo único que solicita es que se ponga mayor atención al equipo.

Francisco Méndez asistió a algunas reuniones de la Liga Mayor de La Laguna, en representación de Vaqueros, pero dejó de hacer presencia con el argumento de que el equipo ya se había vendido. Después vino el desmantelamiento del roster de Vaqueros, cuyos jugadores estelares ahora aparecen en la lista de los Leones de Yucatán. Recibimos copia de documentos oficiales de la Secretaría de Hacienda, en donde consta que el pasado 10 de agosto las cuentas de Erick y Juan José Arellano Hernández fueron desbloqueadas. La información recibida señala que con muchísimos problemas se pudo operar el equipo en 2017 y para evitar mayores dificultades se decidió vender la franquicia al grupo Multimedios, el mismo que este año adquirió el 50 por ciento de los Sultanes de Monterrey.

claudiobeisbol58@gmail.com

Si hoy arrancara la nueva temporada de la Liga Mexicana de Beisbol (LMB), la competencia se realizaría con 15 equipos, luego de que la asamblea del circuito decidió enviar a los Generales de Durango a un año sabático. A pesar de eso la Zona Norte contaría con ocho escuadras, ya que los Rojos del Águila de Veracruz se mudan a Nuevo Laredo, quienes forzosamente serán ubicados en el grupo norteño. La Zona Sur aparentemente quedaría con siete equipos, aunque no se descarta que los Diablos Rojos del México regresen al grupo en que deben estar, de acuerdo a la ubicación geográfica de la Ciudad de México. Se estima difícil jugar la temporada 2018 con 15 equipos y se ve muy probable que Durango sí sea incluido, una vez que la directiva ya cubrió los adeudos que tenía pendientes con la liga, además de tener el apoyo total del gobierno del estado, de acuerdo a lo dicho por el propio José Rosas Aispuro.

Lo cierto es que a Javier Salinas, nuevo titular de la LMB le tocó “bailar con la más fea” pues su llegada al frente del circuito se dio en momentos de gran turbulencia y en plena transición, cuando el grupo en el poder es completamente nuevo, con Gerardo Benavides Pape, como el hombre que lleva la voz cantante, secundado por Alberto Uribe y los hermanos Erick y Juan José Arellano Hernández. Javier Salinas necesita todo el apoyo del grupo en el poder porque su conocimiento del beisbol es escaso, él como experto en Mercadotecnia tiene la encomienda específica de hacer que la liga sea atractiva para los empresarios, así como conseguir recursos que permitan sobre todo a los equipos chicos, operar sin problemas durante la temporada, máxime que la de 2018 será mucho más larga que en años anteriores.

Javier Salinas en sus declaraciones suena demasiado optimista sobre el futuro de la LMB; el directivo asegura que la multipropiedad es positiva, dice que la intervención de los gobiernos en los equipos no sólo es necesaria, sino productiva; en la misma forma acepta que la liga actualmente investiga el caso de los prospectos de ligas mayores que los Diablos Rojos del México arrebataron a los Tigres de Quintana Roo, justo antes de que Carlos Peralta Quintero vendiera la franquicia a un grupo de empresarios que encabeza “El Toro” Fernando Valenzuela. Quizá sea lógico el optimismo de Javier Salinas, pero es indudable que él no toma las decisiones importantes y que está muy lejos de conocer a fondo los principales problemas que desde hace varios años aquejan al nonagenario circuito de verano.

De manera clara y contundente Salinas ha dicho que la LMB sí va a permitir que sigan los movimientos múltiples de jugadores entre equipos de un mismo propietario, como los que descaradamente hicieron este año Monclova y Puebla, así como Yucatán y Unión Laguna. Salinas afirma que esos cambios no son ni la cuarta parte de los movimientos entre equipos que se hacen de cara a una temporada. Se antoja maravilloso encontrar una persona que ocupe el cargo que dejó Plinio Escalante y que sea tan optimista, que asegure que en la LMB todo marcha sobre ruedas y que algunos medios de comunicación suelen exagerar al referirse a los muchos problemas existentes y que urge solucionarlos por el beneficio del circuito de verano. Estamos entonces, en la antesala de la mejor temporada de los últimos 35 años.

Mientras tanto de la oficina de Vaqueros Laguna en Torreón, nos informan que Francisco Méndez ya se encuentra en su casa de Caborca, junto con su familia. Apenas el pasado 12 de septiembre la directiva de Unión Laguna informó que el “Chiper” se haría cargo de la Gerencia Deportiva, de cara a la temporada 2018. Méndez Suárez se desempeñó como Gerente Deportivo toda la temporada 2017, por lo que ahí existe una imprecisión, como en el caso de David Cárdenas Cortés, del que se dijo, dejaba su cargo como Gerente Deportivo, cuando el cargo de este personaje era el de Gerente General. El viaje de Francisco Méndez, junto con su familia a Caborca, es otro indicio de que en la oficina de la organización lagunera están por darse muchos movimientos, en los cuales ya tendrá injerencia el nuevo propietario, del que la afición lo único que solicita es que se ponga mayor atención al equipo.

Francisco Méndez asistió a algunas reuniones de la Liga Mayor de La Laguna, en representación de Vaqueros, pero dejó de hacer presencia con el argumento de que el equipo ya se había vendido. Después vino el desmantelamiento del roster de Vaqueros, cuyos jugadores estelares ahora aparecen en la lista de los Leones de Yucatán. Recibimos copia de documentos oficiales de la Secretaría de Hacienda, en donde consta que el pasado 10 de agosto las cuentas de Erick y Juan José Arellano Hernández fueron desbloqueadas. La información recibida señala que con muchísimos problemas se pudo operar el equipo en 2017 y para evitar mayores dificultades se decidió vender la franquicia al grupo Multimedios, el mismo que este año adquirió el 50 por ciento de los Sultanes de Monterrey.

claudiobeisbol58@gmail.com