Todos los sistemas de riego comunitarios (módulos y distritos de riego, y acuíferos) se sustentan en cuatros pilares de acción: mantenimiento, rehabilitación, operación y administración. En el caso de los módulos o distritos de riego, las acciones de mantenimiento van dirigidas a darle mantenimiento a la infraestructura, mientras que la rehabilitación son acciones de recuperación de la misma. La operación consiste en entregar el servicio de riego a los usuarios a través de las estructuras de control y entrega, mientras que la administración consiste en la contabilización contínua de gastos y ganancias en el sistema de riego. En forma similar, los acuíferos también se sustentan en los mismos pilares de acción como sistemas de riego comunitarios; en este caso el mantenimiento y rehabilitación consiste en ampliación (anexarle más tramos a la columna de extracción de los pozos) y reposición de pozos, así como el mantenimiento de los mismos; la operación consiste en el funcionamiento continuo de todos los pozos, y la administración deberá de consistir en extraer el máximo volumen de agua del acuifero, respecto a los gastos de inversión de los otros pilares de acción. A diferencia de lo anterior, la administración debería de consistir en obtener un máximo beneficio conjunto de lo económico y social y lo ecológico (esto si es que se busca una mayor sustentabilidad hidrológica en la región). Así como los distritos de riego sufrieron la transferencia a los usuarios (CNA, Transferencia de los Distritos de Riego, 1990) para que fueran estos quienes se encargaran de desarrollar las acciones de mantenimiento, rehabilitación, operación y administración, con la asumción que por ser ellos los usuarios, podrían hacer una mejor conservación y manejo de los mismos; también los acuíferos como sistemas de riego (mayormente), como el principal de la Laguna, fueron pasado a la custodia de los usuarios del agua subterránea, a través del Comité Técnico del Aguas Subterráneas -COTAS- (según el Director de Cuencas Centrales del Norte, de la Comisión Nacional del Agua, en una entrevista hecha el 9 de abril de 2019 por el periodista Armando Cobián Lafont y publicada en el periódico del Sol de la Laguna bajo el titulo de un artículo “Comité Técnico de Aguas Subterráneas Convertido en el Mercado Negro del Agua”), menciona, para el caso de la Laguna, que, este organismo fue creado como un órgano auxiliar del consejo de cuencas Nazas-Aguanaval para la toma de decisiones, y tenía como sus objetivos fundamentales el mejorar el uso del agua mediante sistemas más tecnificados de riego, dando legalidad a su uso y sobre todo lograr una sustentabilidad que hoy reclama el acuífero. A una pregunta expresa del periodista, sobre el comportamiento del COTAS, El Director de Cuencas Centrales del Norte de la Comisión Nacional del Agua, dijo que el objetivo para el que fue creado el Comité Técnico de Aguas Subterráneas mejor conocido como (COTAS) se ha desvirtuado por completo ya que existen denuncias de que opera como una ventanilla paralela de la Conagua lo que no es correcto y mucho menos que estén engañando a la gente, su misión era lograr la sustentabilidad y soluciones tecnológicas a la problemática del agua, no vender ni rentar ni prestar derechos de agua. El acuífero principal de la Laguna cuenta con un volumen de recarga de 518 Mm3, uno de concesión de 650 Mm3 y uno de 1,722 Mm3 de extracción de. Este último es 3.3 y 2.6 veces más grande que la recarga y la concesión respectivamente, extraído a través de 2,350 concesiones (dato oficial). Según datos estadísticos, en promedio, existe un gasto, de 32 lps por pozo en operación y un volumen promedio concesionado de 300,000 millares de m3, también por pozo. Al hacer un análisis comparativo entre los datos anteriores, los 32 lps son equivalentes a 0.032 m3/seg, 2,764.8 M3/día y 1,009,152 m3/año. Lo anterior se logra al multiplicar los 0.032 m3/seg por los 86,400 segundos que cuenta un día y como los pozos operan los 365 días del año, los m3/día se multiplican por este número de días en el año, y así se obtiene el volumen en m3 que extrae un pozo al año, lo cual es de 3.36 veces lo consesionado. Por otro lado, si este volumen extraído de 1,009,152 m3 se multiplica por las 2,350 conseciones, resulta un volumen total extraído de 2,371,507,200 m3, equivalente a 2,371 millones de m3, lo cual al dividirse entre los 650 Mm3 consecionados en un año, es 3.6 veces el volumen concesionado en el mismo periodo. Se menciona, que el número de conseciones no son 2,350 sino que 3,650, si esto fuera así, la extracción sería 5.6 veces el volumen consecionado. Esta incertidumbre, en el número de conseciones en operación y el volumen total extraído es producto del comportamiento del COTAS, con la vista gorda de las autoridades institucionales del ramo (contubernio autoridad-usuarios). Con esta descripción queda claro que el COTAS no atiende los cuatro pilares de acción de mantenimiento, rehabilitación, operación y administración del acuífero como sistema de entrega de agua a los usuarios, razón por la cual, este se está llevando a la Región Lagunera a un colapso hidrológico total, difícil de recuperarse. Es urgente que las autoridades del ramo, por presión de la sociedad pongan orden en el manejo del acuífero principal de la Laguna, legado natural de la Región.
Todos los sistemas de riego comunitarios (módulos y distritos de riego, y acuíferos) se sustentan en cuatros pilares de acción: mantenimiento, rehabilitación, operación y administración. En el caso de los módulos o distritos de riego, las acciones de mantenimiento van dirigidas a darle mantenimiento a la infraestructura, mientras que la rehabilitación son acciones de recuperación de la misma. La operación consiste en entregar el servicio de riego a los usuarios a través de las estructuras de control y entrega, mientras que la administración consiste en la contabilización contínua de gastos y ganancias en el sistema de riego. En forma similar, los acuíferos también se sustentan en los mismos pilares de acción como sistemas de riego comunitarios; en este caso el mantenimiento y rehabilitación consiste en ampliación (anexarle más tramos a la columna de extracción de los pozos) y reposición de pozos, así como el mantenimiento de los mismos; la operación consiste en el funcionamiento continuo de todos los pozos, y la administración deberá de consistir en extraer el máximo volumen de agua del acuifero, respecto a los gastos de inversión de los otros pilares de acción. A diferencia de lo anterior, la administración debería de consistir en obtener un máximo beneficio conjunto de lo económico y social y lo ecológico (esto si es que se busca una mayor sustentabilidad hidrológica en la región). Así como los distritos de riego sufrieron la transferencia a los usuarios (CNA, Transferencia de los Distritos de Riego, 1990) para que fueran estos quienes se encargaran de desarrollar las acciones de mantenimiento, rehabilitación, operación y administración, con la asumción que por ser ellos los usuarios, podrían hacer una mejor conservación y manejo de los mismos; también los acuíferos como sistemas de riego (mayormente), como el principal de la Laguna, fueron pasado a la custodia de los usuarios del agua subterránea, a través del Comité Técnico del Aguas Subterráneas -COTAS- (según el Director de Cuencas Centrales del Norte, de la Comisión Nacional del Agua, en una entrevista hecha el 9 de abril de 2019 por el periodista Armando Cobián Lafont y publicada en el periódico del Sol de la Laguna bajo el titulo de un artículo “Comité Técnico de Aguas Subterráneas Convertido en el Mercado Negro del Agua”), menciona, para el caso de la Laguna, que, este organismo fue creado como un órgano auxiliar del consejo de cuencas Nazas-Aguanaval para la toma de decisiones, y tenía como sus objetivos fundamentales el mejorar el uso del agua mediante sistemas más tecnificados de riego, dando legalidad a su uso y sobre todo lograr una sustentabilidad que hoy reclama el acuífero. A una pregunta expresa del periodista, sobre el comportamiento del COTAS, El Director de Cuencas Centrales del Norte de la Comisión Nacional del Agua, dijo que el objetivo para el que fue creado el Comité Técnico de Aguas Subterráneas mejor conocido como (COTAS) se ha desvirtuado por completo ya que existen denuncias de que opera como una ventanilla paralela de la Conagua lo que no es correcto y mucho menos que estén engañando a la gente, su misión era lograr la sustentabilidad y soluciones tecnológicas a la problemática del agua, no vender ni rentar ni prestar derechos de agua. El acuífero principal de la Laguna cuenta con un volumen de recarga de 518 Mm3, uno de concesión de 650 Mm3 y uno de 1,722 Mm3 de extracción de. Este último es 3.3 y 2.6 veces más grande que la recarga y la concesión respectivamente, extraído a través de 2,350 concesiones (dato oficial). Según datos estadísticos, en promedio, existe un gasto, de 32 lps por pozo en operación y un volumen promedio concesionado de 300,000 millares de m3, también por pozo. Al hacer un análisis comparativo entre los datos anteriores, los 32 lps son equivalentes a 0.032 m3/seg, 2,764.8 M3/día y 1,009,152 m3/año. Lo anterior se logra al multiplicar los 0.032 m3/seg por los 86,400 segundos que cuenta un día y como los pozos operan los 365 días del año, los m3/día se multiplican por este número de días en el año, y así se obtiene el volumen en m3 que extrae un pozo al año, lo cual es de 3.36 veces lo consesionado. Por otro lado, si este volumen extraído de 1,009,152 m3 se multiplica por las 2,350 conseciones, resulta un volumen total extraído de 2,371,507,200 m3, equivalente a 2,371 millones de m3, lo cual al dividirse entre los 650 Mm3 consecionados en un año, es 3.6 veces el volumen concesionado en el mismo periodo. Se menciona, que el número de conseciones no son 2,350 sino que 3,650, si esto fuera así, la extracción sería 5.6 veces el volumen consecionado. Esta incertidumbre, en el número de conseciones en operación y el volumen total extraído es producto del comportamiento del COTAS, con la vista gorda de las autoridades institucionales del ramo (contubernio autoridad-usuarios). Con esta descripción queda claro que el COTAS no atiende los cuatro pilares de acción de mantenimiento, rehabilitación, operación y administración del acuífero como sistema de entrega de agua a los usuarios, razón por la cual, este se está llevando a la Región Lagunera a un colapso hidrológico total, difícil de recuperarse. Es urgente que las autoridades del ramo, por presión de la sociedad pongan orden en el manejo del acuífero principal de la Laguna, legado natural de la Región.