/ viernes 1 de enero de 2021

Lenin, auténtico creador del régimen comunista soviético

Vladimir Ilich Ulianov, mejor conocido como Lenin, líder comunista ruso que dirigió la Revolución de Octubre (principios de noviembre de 1917 según el calendario occidental); creó el gobierno comunista soviético que estuvo vigente hasta 1991 (URSS), al cambiar el régimen centralista en federalista.

Lenin, nacido en 1870 en el seno de una familia de clase media de la región del Volga, desde joven tuvo animadversión a los zaristas, cuyo odio se exacerbó al ser ejecutado su hermano, Alejandro Ulianov, acusado de conspiración en 1887.

La Rusia del joven Lenin estaba marcada por el despotismo zarista y por la lucha de los intelectuales que pretendían modernizar el país, hacerlo libre e incorporarlo al mundo europeo.

Estudió en las universidades de Kazán y San Petersburgo, primero el bachillerato y en seguida la carrera de Derecho, pero que según algunos historiadores no terminó ésta última a causa de los disturbios estudiantiles en 1893.

Sus actividades en contra de la autocracia zarista lo llevaron a entrar en contacto con el líder revolucionario ruso, Gueorgui Plejánov, en 1895, y fue él quien lo convenció de adoptar la ideología marxista, motivándolo a fundar en San Petersburgo la Liga de Combate por la Liberación de la Clase Obrera, que a su vez dio nacimiento al Partido Obrero Socialdemócrata Ruso, que presidió Plejánov.

Lenin fue detenido en 1897 y deportado a Siberia, donde estudió pacientemente y de forma sistemática las obras de Marx y Engels, pero en especial “El Capital”, y elaboró su primer trabajo sobre la aplicación del pensamiento marxista a un país atrasado como lo era Rusia.

Después de su liberación en 1900, partió al exilio y fundó en Ginebra el periódico Iskra (“La Chispa”) y dos años más tarde publicó la obra “Qué hacer”, defendiendo la posibilidad de hacer triunfar en una revolución en su país, mediante acciones delíderes de vanguardia, decididos y organizados como un ejército.

En el II Congreso del Partido Socialdemócrata Ruso, en 1903, Lenin impuso dichas ideas al grupo radical bolchevique que él lideraba y para ello defendía un partido fuertemente disciplinado, que fuera vanguardia de una revolución que él creía viable a corto plazo.

En 1905 volvió a San Petersburgo, participando en una revuelta que había estallado como consecuencia de la derrota en el conflicto bélico Rusia contra Japón, y si bien el régimen zarista superó esa crisis, Lenin consideró el movimiento un “ensayo general” de la revolución socialista, pero el fracaso de esa revuelta le obligó a exiliarse de nuevo en Suiza en 1907.

Al estallar la Primera Guerra Mundial (1914-1918), a Lenin tuvo la oportunidad de llevar a la práctica sus ideas, al definir esa contienda bélica como fruto de las contradicciones del capitalismo y el imperialismo. Por ello, en nombre del internacionalismo proletario, llamó a un movimiento socialista a nivel internacional, sin lograrlo; dándole ello a pensar en lanzar una revolución socialista en su país, como primer paso para una revolución mundial.

Un primer intento fallido lo obligó a refugiarse en Finlandia, dejando a Trotski para que dirigiera al partido y tomara el poder mediante un golpe de Estado en los primeros días de noviembre de 1917 (según el calendario de occidente, pero octubre para los rusos).

Ese movimiento se convirtió en la triunfante Revolución de Octubre, gracias a la estrategia bolchevique, al centrar sus demandas en dar fin a la guerra, atrayendo el decidido apoyo de los soldados y las clases populares; prometer el reparto agrario, para lo cual contaron con la simpatía de los campesinos. Fue entonces que Lenin regresó en seguida para presidir el Consejo de Comisarios del Pueblo, o sea un nuevo gobierno.

Como líder indiscutido de las organizaciones de izquierda y de las socialdemócratas, surgió el Partido Comunista en 1918 que dirigió desde entonces al primer Estado socialista de la historia. Cumplió además sus promesas de apartar a Rusia de la guerra y repartir a los campesinos tierras expropiadas a los grandes terratenientes.

Sin embargo, consciente de la aceptación minoritaria de sus ideas radicales (dados los resultados electorales), hizo aun lado la tradición de las elecciones democráticas del socialismo occidental, adoptando una violenta dictadura de un partido único, creando incluso una policía política para perseguir a quienes se oponían al partido y al gobierno.

Dirigió el gobierno durante trágicos años de guerra civil, enfrentando una guerra civil en cuatro frentes a la joven república contra los generales zaristas, apoyados por potencias imperialistas de todo el mundo.

Delegó en León Trotsky la organización del Ejército Rojo, con el cual consiguió resistir el ataque combinado de los contra-revolucionarios. Una vez recuperado el control del antiguo imperio de los zares, articuló el territorio para crear la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) en 1922, dotándola de una constitución al año siguiente.

Aquejado de una grave enfermedad, Lenin se retiró poco a poco de la dirección política, viendo como sus colaboradores más cercanos, Trotsky y Stalin, iniciaban la disputa por la sucesión gubernamental, que finalmente logró el último de ellos.

Lenin muere el 21 de enero de 1924 de esclerosis cerebral, dejando constancia de su preocupación por la creciente burocratización del partido y del Estado, sin que fuera impedimento para que Stalin se apoderara del poder.

¡Hasta la próxima!

Vladimir Ilich Ulianov, mejor conocido como Lenin, líder comunista ruso que dirigió la Revolución de Octubre (principios de noviembre de 1917 según el calendario occidental); creó el gobierno comunista soviético que estuvo vigente hasta 1991 (URSS), al cambiar el régimen centralista en federalista.

Lenin, nacido en 1870 en el seno de una familia de clase media de la región del Volga, desde joven tuvo animadversión a los zaristas, cuyo odio se exacerbó al ser ejecutado su hermano, Alejandro Ulianov, acusado de conspiración en 1887.

La Rusia del joven Lenin estaba marcada por el despotismo zarista y por la lucha de los intelectuales que pretendían modernizar el país, hacerlo libre e incorporarlo al mundo europeo.

Estudió en las universidades de Kazán y San Petersburgo, primero el bachillerato y en seguida la carrera de Derecho, pero que según algunos historiadores no terminó ésta última a causa de los disturbios estudiantiles en 1893.

Sus actividades en contra de la autocracia zarista lo llevaron a entrar en contacto con el líder revolucionario ruso, Gueorgui Plejánov, en 1895, y fue él quien lo convenció de adoptar la ideología marxista, motivándolo a fundar en San Petersburgo la Liga de Combate por la Liberación de la Clase Obrera, que a su vez dio nacimiento al Partido Obrero Socialdemócrata Ruso, que presidió Plejánov.

Lenin fue detenido en 1897 y deportado a Siberia, donde estudió pacientemente y de forma sistemática las obras de Marx y Engels, pero en especial “El Capital”, y elaboró su primer trabajo sobre la aplicación del pensamiento marxista a un país atrasado como lo era Rusia.

Después de su liberación en 1900, partió al exilio y fundó en Ginebra el periódico Iskra (“La Chispa”) y dos años más tarde publicó la obra “Qué hacer”, defendiendo la posibilidad de hacer triunfar en una revolución en su país, mediante acciones delíderes de vanguardia, decididos y organizados como un ejército.

En el II Congreso del Partido Socialdemócrata Ruso, en 1903, Lenin impuso dichas ideas al grupo radical bolchevique que él lideraba y para ello defendía un partido fuertemente disciplinado, que fuera vanguardia de una revolución que él creía viable a corto plazo.

En 1905 volvió a San Petersburgo, participando en una revuelta que había estallado como consecuencia de la derrota en el conflicto bélico Rusia contra Japón, y si bien el régimen zarista superó esa crisis, Lenin consideró el movimiento un “ensayo general” de la revolución socialista, pero el fracaso de esa revuelta le obligó a exiliarse de nuevo en Suiza en 1907.

Al estallar la Primera Guerra Mundial (1914-1918), a Lenin tuvo la oportunidad de llevar a la práctica sus ideas, al definir esa contienda bélica como fruto de las contradicciones del capitalismo y el imperialismo. Por ello, en nombre del internacionalismo proletario, llamó a un movimiento socialista a nivel internacional, sin lograrlo; dándole ello a pensar en lanzar una revolución socialista en su país, como primer paso para una revolución mundial.

Un primer intento fallido lo obligó a refugiarse en Finlandia, dejando a Trotski para que dirigiera al partido y tomara el poder mediante un golpe de Estado en los primeros días de noviembre de 1917 (según el calendario de occidente, pero octubre para los rusos).

Ese movimiento se convirtió en la triunfante Revolución de Octubre, gracias a la estrategia bolchevique, al centrar sus demandas en dar fin a la guerra, atrayendo el decidido apoyo de los soldados y las clases populares; prometer el reparto agrario, para lo cual contaron con la simpatía de los campesinos. Fue entonces que Lenin regresó en seguida para presidir el Consejo de Comisarios del Pueblo, o sea un nuevo gobierno.

Como líder indiscutido de las organizaciones de izquierda y de las socialdemócratas, surgió el Partido Comunista en 1918 que dirigió desde entonces al primer Estado socialista de la historia. Cumplió además sus promesas de apartar a Rusia de la guerra y repartir a los campesinos tierras expropiadas a los grandes terratenientes.

Sin embargo, consciente de la aceptación minoritaria de sus ideas radicales (dados los resultados electorales), hizo aun lado la tradición de las elecciones democráticas del socialismo occidental, adoptando una violenta dictadura de un partido único, creando incluso una policía política para perseguir a quienes se oponían al partido y al gobierno.

Dirigió el gobierno durante trágicos años de guerra civil, enfrentando una guerra civil en cuatro frentes a la joven república contra los generales zaristas, apoyados por potencias imperialistas de todo el mundo.

Delegó en León Trotsky la organización del Ejército Rojo, con el cual consiguió resistir el ataque combinado de los contra-revolucionarios. Una vez recuperado el control del antiguo imperio de los zares, articuló el territorio para crear la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) en 1922, dotándola de una constitución al año siguiente.

Aquejado de una grave enfermedad, Lenin se retiró poco a poco de la dirección política, viendo como sus colaboradores más cercanos, Trotsky y Stalin, iniciaban la disputa por la sucesión gubernamental, que finalmente logró el último de ellos.

Lenin muere el 21 de enero de 1924 de esclerosis cerebral, dejando constancia de su preocupación por la creciente burocratización del partido y del Estado, sin que fuera impedimento para que Stalin se apoderara del poder.

¡Hasta la próxima!