/ domingo 11 de julio de 2021

La guardia en alto

Tras el reporte de la Secretaría de Salud, en el que informa que en los últimos días se han registrado 8 mil casos nuevos de coronavirus, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) confirma lo que muchos temíamos: que México pasa por una tercera ola de Covid-19, lo que obliga a tomar conciencia de adoptar medidas básicas sanitarias: lavarse constantemente las manos, aplicarse gel antibacterial, guardar la sana distancia y usar en todo lugar el cubrebocas.

Por el momento, la situación más crítica la están viviendo los habitantes de los estados de la península de Yucatán, así como Baja California Sur y la Ciudad de México”, informó Sylvain Aldighieri, gerente de Incidente para Covid-19 de la OPS.

Yucatán es uno de los estados más perjudicados por la pandemia: supera los 49 mil casos positivos, de los cuales, 30 mil 621 se han registrado en la ciudad de Mérida, la popular capital yucateca.

En el estado de Campeche, donde se ha confirmado la presencia de cuatro variantes del virus SARS-CoV-2 (Alfa, Beta, Gamma y Épsilon), “las medidas de restricción se mantendrán hasta que las autoridades federales den a conocer el nuevo panorama epidemiológico con base en los nuevos indicadores del semáforo para medir los niveles de riesgo en cada entidad”, informa un conocido diario capitalino mediante una nota firmada por la periodista Nancy González Domínguez.

La entidad que puso a sus cinco municipios en nivel 5 de alerta es Baja California Sur. Los municipios de Los Cabos y La Paz ya estaban en nivel 5 Crítico del Sistema de Alertas Sanitarias por el COVID-19, pero el gobierno de ese estado de la República resolvió:

“Tras analizar el comportamiento de la pandemia en #BCS, el Comité Estatal de Seguridad en Salud decidió que de manera preventiva y para salvaguardar la salud de la población, #Comondú, #Loreto y #Mulegé pasen al nivel 5 del Sistema de Alertas Sanitarias, del 7 al 13 de julio”, publicó el pasado 6 de julio Carlos Mendoza Davis en su cuenta de Twitter.

Algunas ciudades importantes del país acaban de suspender actividades en “centros de entretenimiento y esparcimiento; ferias y conciertos, salones de eventos, congresos y foros, balnearios…”. Tal es el caso de Xalapa, la capital del estado de Veracruz, que estará en el nivel de riesgo máximo entre los días 5 y 18 de julio de este año.

Otras ciudades que viven situaciones bastante preocupantes son el puerto “jaibo” de Tampico, Tamaulipas y Salina Cruz, Oaxaca. Sin embargo, en algunas de las localidades y entidades que he mencionado la vida transcurre como si nada digno de preocupación ocurriera. Lo digo porque, a pesar de que los contagios y muertes aumentan, en varios lugares se sigue privilegiando la reactivación económica en la nueva normalidad, restándole importancia a la salud de la población.

Lo importante es que gobierno y ciudadanía tomen conciencia de que la curva epidémica en México continúa, como lo demuestra el auge de contagios que tiene lugar en aquellos entornos donde de manera irresponsable se relajan las medidas de control y es más fácil que se produzcan aglomeraciones sin la debida protección.

Es importante tomar también conciencia de la amenaza de expansión de la variante Delta, con mayor poder de contagio que otras variantes, y que, debido a ella, la tasa de contagios se ha disparado entre los jóvenes, la mayoría de los cuales no ha recibido ninguna dosis de ninguna vacuna. En Sinaloa, por ejemplo, “el 24 por ciento total de los casos pueden ser de la variante Delta”, que tiene presencia en más de 80 naciones desde que la detectaron en India, un país donde la Covid-19 puso de rodillas al sistema de salud.

Ojalá que el aprendizaje obtenido de las dolorosas experiencias de otras naciones del mundo nos ayude mantener la guardia en alto. Si bajamos la guardia y no nos cuidamos, podemos llegar a vivir una auténtica pesadilla.


Armando Maya Castro | @armayacastro

Tras el reporte de la Secretaría de Salud, en el que informa que en los últimos días se han registrado 8 mil casos nuevos de coronavirus, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) confirma lo que muchos temíamos: que México pasa por una tercera ola de Covid-19, lo que obliga a tomar conciencia de adoptar medidas básicas sanitarias: lavarse constantemente las manos, aplicarse gel antibacterial, guardar la sana distancia y usar en todo lugar el cubrebocas.

Por el momento, la situación más crítica la están viviendo los habitantes de los estados de la península de Yucatán, así como Baja California Sur y la Ciudad de México”, informó Sylvain Aldighieri, gerente de Incidente para Covid-19 de la OPS.

Yucatán es uno de los estados más perjudicados por la pandemia: supera los 49 mil casos positivos, de los cuales, 30 mil 621 se han registrado en la ciudad de Mérida, la popular capital yucateca.

En el estado de Campeche, donde se ha confirmado la presencia de cuatro variantes del virus SARS-CoV-2 (Alfa, Beta, Gamma y Épsilon), “las medidas de restricción se mantendrán hasta que las autoridades federales den a conocer el nuevo panorama epidemiológico con base en los nuevos indicadores del semáforo para medir los niveles de riesgo en cada entidad”, informa un conocido diario capitalino mediante una nota firmada por la periodista Nancy González Domínguez.

La entidad que puso a sus cinco municipios en nivel 5 de alerta es Baja California Sur. Los municipios de Los Cabos y La Paz ya estaban en nivel 5 Crítico del Sistema de Alertas Sanitarias por el COVID-19, pero el gobierno de ese estado de la República resolvió:

“Tras analizar el comportamiento de la pandemia en #BCS, el Comité Estatal de Seguridad en Salud decidió que de manera preventiva y para salvaguardar la salud de la población, #Comondú, #Loreto y #Mulegé pasen al nivel 5 del Sistema de Alertas Sanitarias, del 7 al 13 de julio”, publicó el pasado 6 de julio Carlos Mendoza Davis en su cuenta de Twitter.

Algunas ciudades importantes del país acaban de suspender actividades en “centros de entretenimiento y esparcimiento; ferias y conciertos, salones de eventos, congresos y foros, balnearios…”. Tal es el caso de Xalapa, la capital del estado de Veracruz, que estará en el nivel de riesgo máximo entre los días 5 y 18 de julio de este año.

Otras ciudades que viven situaciones bastante preocupantes son el puerto “jaibo” de Tampico, Tamaulipas y Salina Cruz, Oaxaca. Sin embargo, en algunas de las localidades y entidades que he mencionado la vida transcurre como si nada digno de preocupación ocurriera. Lo digo porque, a pesar de que los contagios y muertes aumentan, en varios lugares se sigue privilegiando la reactivación económica en la nueva normalidad, restándole importancia a la salud de la población.

Lo importante es que gobierno y ciudadanía tomen conciencia de que la curva epidémica en México continúa, como lo demuestra el auge de contagios que tiene lugar en aquellos entornos donde de manera irresponsable se relajan las medidas de control y es más fácil que se produzcan aglomeraciones sin la debida protección.

Es importante tomar también conciencia de la amenaza de expansión de la variante Delta, con mayor poder de contagio que otras variantes, y que, debido a ella, la tasa de contagios se ha disparado entre los jóvenes, la mayoría de los cuales no ha recibido ninguna dosis de ninguna vacuna. En Sinaloa, por ejemplo, “el 24 por ciento total de los casos pueden ser de la variante Delta”, que tiene presencia en más de 80 naciones desde que la detectaron en India, un país donde la Covid-19 puso de rodillas al sistema de salud.

Ojalá que el aprendizaje obtenido de las dolorosas experiencias de otras naciones del mundo nos ayude mantener la guardia en alto. Si bajamos la guardia y no nos cuidamos, podemos llegar a vivir una auténtica pesadilla.


Armando Maya Castro | @armayacastro