/ jueves 28 de mayo de 2020

La cultura de respetar

Con la naturaleza no se juega. La contaminamos, nos burlamos de ella, presumimos de que la dominamos... mentira.

Tampoco con el Covid-19 se puede hacer grilla. No hay, como ya escribí en estas páginas, una nueva normalidad, nadie va a domar a la naturaleza y además tenemos que aprender a dejar de correr.

Todos ansían salir a la calle el lunes, millones ya salieron y otros tantos nunca se metieron a su casa. Se entiende que hay necesidad económica, los pobres necesitan salir a trabajar para comer. Pero la avaricia de los ricos no tiene perdón ni pretexto que valga.

Abrieron todo tipo de tiendas sin protocolo alguno y no solo no oyen, no atienden lo que leen y si se les lleva a una sala de terapia intensiva en cualquier hospital para que vean la desgracias en persona, la seguirán negando.

Van ejemplos sencillos y cotidianos en esta Laguna nuestra. El miércoles 27 a las 15:30 horas dieron marcha atrás en el lanzamiento del Falcon9 que llevaría a dos astronautas a la Estación Espacial Internacional. Pero el viento en Cabo Kennedy, Florida se negó a irse y se suspendió por el momento el viaje de Bob Behnken y Doug Hurley.

Monseñor Luis Martín Barrera Beltrán firmó esta semana un decreto como Obispo de Torreón, "la actividad de las parroquias de la Diócesis se reinicia el domingo 1 de junio". Solo horas después dio una conferencia de prensa, las actividades públicas de la iglesia católica se posponen por 15 días.

La Jornada de Sana Distancia termina esta semana y luego ¿quién sabe realmente cuál será la respuesta del coronavirus?

¿Estamos preparados para lo que vendrá el Día Después de Mañana?

Afortunadamente la gente de la cultura en la Región Laguna se ha portado mas cauta que los políticos, a pesar de que la cotidiana precariedad no da para más. Se aprietan el cinturón, pero no han retado a la autoridad, como sí lo han hecho otros gremios.

Los promotores, directivos, trabajadores, artistas, profesores del arte, están atentos a las indicaciones con las que podrán reanudar sus actividades. Otros colectivos en cambio abrieron negocios clausurados y se sentaron a atender a los clientes, que entraron a sus negocios y también se sentaron para ser atendidos. Nadie sigue protocolo alguno.

El martes murieron 560 personas y más de 3,000 fueron infectados con Covid-19 en México, aun así hablan de la nueva normalidad y de salir a la calle el lunes a trabajar.

Con la naturaleza no se juega. La contaminamos, nos burlamos de ella, presumimos de que la dominamos... mentira.

Tampoco con el Covid-19 se puede hacer grilla. No hay, como ya escribí en estas páginas, una nueva normalidad, nadie va a domar a la naturaleza y además tenemos que aprender a dejar de correr.

Todos ansían salir a la calle el lunes, millones ya salieron y otros tantos nunca se metieron a su casa. Se entiende que hay necesidad económica, los pobres necesitan salir a trabajar para comer. Pero la avaricia de los ricos no tiene perdón ni pretexto que valga.

Abrieron todo tipo de tiendas sin protocolo alguno y no solo no oyen, no atienden lo que leen y si se les lleva a una sala de terapia intensiva en cualquier hospital para que vean la desgracias en persona, la seguirán negando.

Van ejemplos sencillos y cotidianos en esta Laguna nuestra. El miércoles 27 a las 15:30 horas dieron marcha atrás en el lanzamiento del Falcon9 que llevaría a dos astronautas a la Estación Espacial Internacional. Pero el viento en Cabo Kennedy, Florida se negó a irse y se suspendió por el momento el viaje de Bob Behnken y Doug Hurley.

Monseñor Luis Martín Barrera Beltrán firmó esta semana un decreto como Obispo de Torreón, "la actividad de las parroquias de la Diócesis se reinicia el domingo 1 de junio". Solo horas después dio una conferencia de prensa, las actividades públicas de la iglesia católica se posponen por 15 días.

La Jornada de Sana Distancia termina esta semana y luego ¿quién sabe realmente cuál será la respuesta del coronavirus?

¿Estamos preparados para lo que vendrá el Día Después de Mañana?

Afortunadamente la gente de la cultura en la Región Laguna se ha portado mas cauta que los políticos, a pesar de que la cotidiana precariedad no da para más. Se aprietan el cinturón, pero no han retado a la autoridad, como sí lo han hecho otros gremios.

Los promotores, directivos, trabajadores, artistas, profesores del arte, están atentos a las indicaciones con las que podrán reanudar sus actividades. Otros colectivos en cambio abrieron negocios clausurados y se sentaron a atender a los clientes, que entraron a sus negocios y también se sentaron para ser atendidos. Nadie sigue protocolo alguno.

El martes murieron 560 personas y más de 3,000 fueron infectados con Covid-19 en México, aun así hablan de la nueva normalidad y de salir a la calle el lunes a trabajar.