¿Dónde está, oh muerte tu agujón? ¿Dónde, oh sepulcro, tu victoria? Satanás aparece como ganador en el jardín del Edén y cuando Jesús murió en la cruz, pero Dios cambio esta aparente victoria en fracaso cuando Jesús resucito de la muerte.
Aquellos soldados romanos que días antes se habían burlado de Jesús, desnudándole, y le echaron encima una manta escarlata y pusieron sobre su cabeza una corona tejida de espinas y una caña en su mano derecha; e hincando la rodilla delante de él, le escarnecían, diciendo, !Salve, Rey de los judíos! Y escupiéndole, tomaban la caña y le golpeaban en la cabeza… y le llevaron a crucificarle. Ahora se les habían encomendado cuidar la tumba de Jesús, los fariseos fueron ante Pilato y le dijeron: Señor, nos acordamos que aquel engañador dijo, viviendo aun: Después de tres días resucitare, manda pues que se asegure el sepulcro hasta el tercer día, no sea que vengan sus discípulos de noche, y lo hurten y digan al pueblo ; Resucito de entre los muertos, y será el postrer error peor que el primero, y Pilato les dijo: Ahí tenéis una guardia; id, aseguradlo como saben. Los líderes religiosos tomaron muy en serio la resurrección de Jesús más que sus discípulos. Y tomaron todas las precauciones para que su cuerpo permaneciera en la tumba, la cual tenía una sola entrada, la cual pudieron sellarla con una cuerda y la sellaron con arcilla de los extremos de la cuerda, ya con la guardia romana los discípulos de Jesús no se atreverían a robar el cadáver de su maestro. Pero son minutos antes de la hora primera (6 de la mañana) del primer día de la semana, hubo un gran terremoto los guardias romanos, acostumbrados al combate sus piernas empiezan a chocar una con otra, el temor les hace retroceder al ver que un ángel del Señor descendiendo del cielo y llegando, removió la piedra, de miedo del ángel, los guardias temblaron y se quedaron como muertos, algunos de la guardia fueron a la ciudad, y dieron aviso a los principales sacerdotes de las cosas que habían acontecido, y reunidos en consejo dieron mucho dinero a los saldados, diciendo: Decid vosotros: Sus discípulos vinieron de noche, y lo hurtaron, estando nosotros dormidos, y si esto lo oyere el gobernador, nosotros le persuadiremos, y os pondremos a salvo. Y ellos, tomando el dinero, hicieron como se les había instruido. Mientras tanto Jesús aparece a las mujeres, tenían un solo propósito, “vinieron al sepulcro, trayendo las especies aromáticas que habían preparado”, y gran sorpresa, hallaron removida la piedra del sepulcro; y entrando, no hallaron el cuerpo del Señor Jesús. Aconteció que estando ellas perplejas por esto, se pararon junto a ellas dos varones con vestiduras resplandecientes, como tuvieron temor, y bajaron el rostro a tierra, les dijeron: ¿porque buscáis entre los muertos al que vive? NO ESTÁ AQUÍ, SINO QUE HA RESUCITADO. Es imposible querer hacer creer a una persona lo que no quiere creer o se resiste a creer, Jesús se apareció a más de quinientas hermanos a la vez, (con pruebas indubitables) escribió Pablo y al último que de todos, como a un abortivo me aprecio a mí. Así mismo como Jesús resucito, la promesa es para los que duermen en él, Estimada es a los ojos de Jehová la muerte de sus santos Salmos 116:15, bienaventurados de aquí en adelante los muertos que mueren en el Señor. Si dice el Espíritu, descansaran de sus trabajos porque sus obras con ellos siguen. Porque si creemos que Jesús murió y resucito, así también Dios con Jesús a los que durmieron con el… porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitaran primero y luego nosotros los que vivimos los que hallamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor. En esto se manifiestan los hijos de Dios, y los hijos del diablo, todo aquel que no hace justicia y que no ama a su hermano no es de Dios. Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios, porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres Jesucristo hombre, el cual se dio a sí mismo en rescate por todos… este es el evangelio que predicamos, que si confesares con tu boca (y pides perdón por tus pecados) que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levanto de los muertos serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación. Solo imagínate en su presencia, de pie, de rodillas, o con las manos levantadas cantando; ¡ALELUYA CRISTO VIVE! ¡HA RESUCITADO! Y sin santidad nadie vera al Señor. hotemdavid@hotmail.com
