Algo urgente tendrá que hacer el canciller Marcelo Ebrard para desactivar las minas que están sembradas en su camino a una posible candidatura a la presidencia y que, ante diversos señalamientos hacia personajes que en el pasado fueron sus cercanos colaboradores, amenazan con explotar a principios del siguiente año para colocarlo como un presunto enemigo de la Cuarta Transformación.
De tiempo atrás se ha mencionado que personajes cercanos al exjefe de Gobierno del Distrito Federal ocupan importantes cargos como asesores del gobernador del estado de Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca; lo anterior en referencia específica a Cuitláhuac Bardán Esquivel, quien se desempeñó como Coordina-dor Ejecutivo de Gabinete en la administración capitalina de Ebrard.
Se han ido apagando los rumores ante un descenso también en la temperatura del caso del mandatario tamaulipeco, que en su momento se convirtió en prioridad para la administración de Andrés Manuel López Obrador y que ha sido desplazado ahora por una operación de gobierno enfocada a resolver profundas pugnas internas, y por la añeja confrontación que se tiene con el Instituto Nacional Electoral, ahora por la Consulta de Revocación.
No obstante, documentos en poder de este columnista dan cuenta de que la sombra de Cuitláhuac Bardán podría oscurecer nuevamente el panorama para el Canciller; pues la operación de su muy cercano personaje se habría extendido hacia temas incluso de índole privada, que destacan por su carácter de escandaloso, y que hoy se encuentran bajo investigación por parte de autoridades como la UIF y la Fiscalía General de la República.
Resulta que Bardán, y en particular su empresa Código 21 Consultoría Política S.A. de C.V., se encuentran entre los beneficiados de la nueva administración de la Cooperativa La Cruz Azul; la que pugnó por expulsar de la presidencia a Guillermo Álvarez Cuevas, y que llegó a repetir los actos que por años denunció, al grado de hacer quebrantos a los socios cooperativistas por alrededor de 300 millones de pesos en tan sólo un mes.
A detalle, José Antonio Marín y Víctor Manuel Velázquez, los eternos disidentes del famoso Billy, entregaron a la razón social de Cuitláhuac Bardán más de 11 millones de pesos, presuntamente justificados con cuatro facturas emitidas entre el 20 de agosto y el 21 de septiembre de 2021; el concepto en todos los casos era el de Estrategias de Negociación con Empresas.
De acuerdo con los registros oficiales, la consultoría política no es el único negocio de Bardán; pues además de prestar sus servicios al Gobierno de Tamaulipas, el asesor estrella se ha hecho de otros contratos en el sector público hasta por 42 millones de pesos; esto a través de una empresa de fumigación que encabeza su hermano Itzcoatl Bardán Esquivel y que se identifica bajo la razón social FUMI-DIP Control de Plagas S.A. de C.V.
El titular de Relaciones Exteriores deberá moverse muy rápido, para desmarcarse de lo que podría ser un nuevo obstáculo en su ya sabida aspiración.
Gracias por acompañarnos un año más.
Nos encontramos el próximo lunes 10 de enero del 2022. Que todos sus planes avancen en medio de atmósferas adversas, de pandemia y políticas económicas que parecen inesperadas.
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